* Pobladores piden agua, comida o una playera, pues se quedaron sin nada
* Urge rehabilitar carreteras o construir caminos alternos para llegar a las zonas de desastre
Chilpancingo, Gro. A 10 días del impacto del huracán “John” en Guerrero, muchos pueblos de Acapulco y Coyuca de Benítez continúan bajo el agua, sin acceso carretero, sin agua, comida, ropa ni zapatos, Erika Sánchez, líder del Movimiento Antorchista en las regiones de Acapulco y Costa lamentó la situación en la que se encuentran cientos de familias, pues dijo “es totalmente indescriptible la magnitud del problema en la zona, donde se palpa la lentitud de los gobiernos federal, estatal y municipales en tomar algunas medidas”.
Luego de invitar a las organizaciones a buscar juntos el bienestar de la población y ayudar a reconstruir Guerrero, informó que en Acapulco hay más de 80 mil viviendas afectadas en 40 colonias, número que incrementará cuando puedan entrar a zonas aún inaccesibles; la líder social destacó que, en el caso de Coyuca de Benítez, hay afectaciones graves en 44 comunidades donde algunas quedaron totalmente sepultadas por el agua y lodo.
En esta zona había descontento social porque los apoyos para los damnificados del huracán “Otis” no fueron entregados de manera general y ahora “John” los dejó totalmente desprotegidos, sin casas, cultivos ni pertenencia alguna. La gente está totalmente desprotegida porque la fuerza del agua se llevó sus cultivos, casas, electrodomésticos, muebles, ropa y zapatos, quedándose sin nada.
A este panorama desolador, se suma la incomunicación debido a que las carreteras han quedado totalmente colapsadas, “intentamos llegar a pueblos de Atoyac y Tecpan pero nos quedamos a mitad del camino, es frustrante no poder seguir avanzando porque muchas comunidades siguen sepultadas por el agua y el lodo; solicitamos a las autoridades que se rehabiliten las carreteras o se abran caminos alternos para acceder a pueblos incomunicados, donde la gente tiene 10 días sin servicios, sin casa, sin agua ni comida, aquí se respira un ánimo de tristeza y desolación”, enfatizó Erika Sánchez.
La líder social enfatizó que, aunque es algo que pudiera sonar cruel la gente pide comida y agua, pues informó, las tiendas están ya vacías y en las que aún tienen algo, los precios de los productos están totalmente elevados, dando como ejemplo, que una sola pieza de huevo cuesta hasta 10 pesos y cobran 30 pesos por hacer una recarga telefónica.
Dijo que, como miembro del Movimiento Antorchista buscan organizar a la gente para limpiar los caminos, sacar lodo de las casas, faenas generales con la intención de darle a la gente una alternativa mientras las autoridades empiezan a tomar medidas y si no las toman, abanderarán las necesidades de la gente.
Ante ello, destacó que en días pasados, la organización comenzó una Jornada Nacional de recolección de víveres y analiza el tema de instalación de comedores comunitarios: “plantemos instalar comedores en Los Cimientos y El Papayo, que son de los pueblos más afectados de Coyuca de Benítez; en Las Cruces no hay electricidad, en Apalani, municipio de Acapulco, la carretera está totalmente colapsada y nosotros, con palas y picos estamos apoyando a las zonas más vulnerables”.
La dirigente antorchista lamentó la insensibilidad del gobierno federal e invitó a la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum, a visitar la zona para que tenga claridad de la magnitud de los hechos, “la invitamos a recorrer las comunidades porque sólo así puede garantizar un plan real de atención para la gente”.
Finalmente, invitó a la población en general a solidarse con los centros de acopio del Movimiento Antorchista que llega, aunque sea caminando, a las zonas de más difícil acceso “garantizamos que cada grano de arroz que se está donando tiene como destino una colonia con graves destrozos o comunidad que quedó sepultada bajo el agua y lodo”, finalizó.
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