Monterrey, Nuevo León.- La oficina de Agua y Drenaje de Monterrey se deslindó de las afectaciones que enfrentan campesinos del municipio de Linares por el desvío del cauce del río Potosí y de la posibilidad de buscar una solución.
Esto, con el argumento de que el asunto no es de su competencia, sino de autoridades del Gobierno local o de instancias de mayor nivel gubernamental.
Así lo notificó el titular de la dependencia a los trabajadores del campo después de que estos acudieron, en comisión, enviados por la Dirección de Gobierno del estado a la oficina administradora del agua.
José Flores, quien los recibió, arguyó que la dependencia no está facultada para tomar conocimiento del asunto; por tanto, se limitó a decir que el tema no le compete y sugirió que los agraviados busquen una audiencia con funcionarios del Gobierno estatal.
Los trabajadores del campo recordaron que se apersonaron en las oficinas porque fueron enviados por funcionarios de la Dirección del Gobierno estatal quienes también evadieron el problema.
Los inconformes aseguraron que volverán al Gobierno estatal, pues dijeron que solo se trató de una mala jugada, pues los mandaron a donde no les iban a resolver nada.
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