MOVIMIENTO ANTORCHISTA NACIONAL

Cobaez Trancoso, un exitoso proyecto educativo logrado por los antorchistas zacatecanos

image

El 17 de agosto del año 2000, después de varias pláticas realizadas por Antonio Alvarado Ornelas, líder estatal del Movimiento Antorchista en Zacatecas, con María Esther de la Torre Herrera, directora general del Subsistema Educativo, fue que se logró el aval para instalar la extensión del Colegio de Bachilleres (COBAEZ), plantel “Víctor Rosales”, de Guadalupe, en el municipio de Trancoso.

La iniciativa respondía a la necesidad de los jóvenes en edad de cursar el bachillerato general y tener otra opción del nivel medio superior en la cabecera municipal, por lo que lo que padres de familia y ciudadanos organizados en Antorcha, encabezados por Angélica Villa Enciso y José Antonio Tamayo Rodríguez, entre otros destacados dirigentes, y lograron la respuesta  de las autoridades para empezar las clases.

El nuevo proyecto educativo inició desde cero, sin terreno ni instalaciones propias, solo con el sueño de muchos por acercar escuelas dignas para sus hijos. El ciclo escolar de agosto del año 2000 arrancó con 28 alumnos de primer grado, luego de absorber a estudiantes truncos o que viajaban hasta Guadalupe y la capital, buscando certificarse como bachilleres.

Tomando como referencia los documentos de archivo y los testimonios de padres de familia que participaron activamente en la gestión ante autoridades ejidales y educativas, en este 2022, el plantel Trancoso está cumpliendo sus primeros 22 años de iniciar como extensión del “Víctor Rosales” en esta localidad.  

Vale decir, que dado que ya existía la preparatoria VI, un sector representado por los maestros y directivos de ésta, veían en el proyecto una seria competencia; existía la inquietud sobre cuál de las dos instituciones era mejor, dado el prestigio logrado por  COBAEZ, que cubría con cerca de 40 planteles a prácticamente todo el territorio estatal.

Finalmente, comenzaron los trabajos en coordinación con autoridades de educación y del respaldo social. En ese tiempo se consiguió un local en renta ubicado al lado de la carretera, pero no tenía las condiciones favorables al carecer de sanitarios propios, había hacinamiento y desde luego que se requerían espacios más amplios para la práctica deportiva, cultural y para el trabajo administrativo.

Mientras tanto, avanzaba la gestión con las autoridades ejidales, a quien se le solicitó la donación del terreno, lo que tuvo buena respuesta, y tras de llevar a cabo el procedimiento legal y ordinario, finalmente se hizo la entrega del predio aledaño al salón ejidal. Esta acción fue muy noble por parte de los ejidatarios de Trancoso.

Ahora había que tomar posesión del mismo, pero esto también tenía sus opositores, por lo que el día que sería cercado se presentó un grupo contrario, que aunque minoritario alegaba que debía respetarse el lugar para instalar allí un Jardín de Niños; y tras mucho tiempo de alegatos, al final tuvieron que ceder porque los ejidatarios ya habían tomado una decisión en favor del proyecto de los antorchistas y no dieron marcha atrás.

Ya era otra etapa, habría que conseguir aulas, pues para el año 2003, la matrícula había crecido y ya se tenían alumnos en los tres grados del bachillerato y la forma en cómo se resolvió provisionalmente fue en las carrocerías de camiones. Así trabajaron los maestros antorchistas, sin salario y sin ninguna prestación económica oficial más que con la ayuda económica de la organización y la solidaridad de padres de familia que brindaban un apoyo simbólico, alimentaban a sus hijos e invitaban el desayuno a los maestros iniciadores, el COBAEZ tomaba forma.

Luego, como producto de la lucha permanente de los antorchistas y de la gestión ante el gobierno del estado, fue que se inició con la construcción de las dos primeras aulas; lo que cambió la perspectiva de los estudiantes y maestros, mientras que los estudios eran avalados por la Dirección General y por autoridades del plantel en Guadalupe, que cobijó al naciente plantel.

Desde luego que la gestión ha sido permanente, lo que permitió la ampliación y mejoramiento de la planta física, para lo cual desde 2007  intervino el respaldo de Osvaldo Avila Tizcareño, actual dirigente antorchista, que logró la etiquetación de recursos de la federación que fueron aplicados por el gobierno en el domo; así también en al menos 5 aulas de las que se cuentan, pues el plantel no está aislado de las decenas de obras que la organización ha logrado históricamente en Trancoso.

Actualmente la institución es conducida por la Directora Martha Delia González Olivas, destacada integrante del Comité Estatal de Antorcha en Zacatecas, quien ha sabido guiar con prestigio académico, con el desarrollo de actividades culturales, deportivas y de esparcimiento que brinda formación integral de la juventud.

A su vez, el COBAEZ cuenta con su planta docente, administrativa y de apoyo reconocida, tienen certeza laboral percibiendo un salario que corresponde a su antigüedad y función ante el subsistema.

Por su parte, los maestros siguen desarrollando sus funciones académicas  profesionalizándose y actualizándose para corresponder con la comunidad estudiantil, con la ciudadanía organizada que intervino para fundar el colegio y con la población en general.

Mi opinión es motivada por el 22 aniversario, que este año debemos celebrar los antorchistas del municipio, en conjunto con autoridades y la comunidad escolar, labor que no fue nada sencilla.

Además de que es en reconocimiento a los dirigentes y activistas de Antorcha que a lo largo de 34 años de presencia en Trancoso han dejado huella a su paso y que siguen presentes en la memoria de muchos ciudadanos de corazón noble y no cegados por ambiciones personales, sino reconociendo el esfuerzo organizativo en el municipio y la región.

0 Comentarios:

Dejar un Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados *

TRABAJOS ESPECIALES

Ver más