Muy revelador resulta el informe presentado los últimos días, sobre el estado que guardó la democracia en el mundo hasta 2021 y valedera para nuestros días, publicado por la prestigiada revista londinense, The Economist, que aborda la actualidad de las relaciones internacionales y de la economía desde un marco global, con más de 75 periodistas procedentes de los cinco continentes.
En este se explica que de los 167 países estudiados solo 23, el 14%, tenían democracias plenas, respetaban los derechos políticos, tenían elecciones libres y justas y contaban con un eficaz sistema de control y contrapesos institucionales. El documento concluye que hay un importante retroceso de la democracia en el mundo.
El resultado del análisis, destaca que México se desplomó en el Índice de Democracia 2021, pues mientras en 2020 el país obtuvo 6.07 puntos, en 2021 retrocedió a 5.54 puntos, que lo coloca “en camino al autoritarismo”, índice que se elabora a partir de la medición y clasificación de 60 variables en 5 categorías, que se califican del cero al 10, obteniendo un 3.13 en cultura política; en funcionamiento del gobierno: 5.0; en libertades civiles: 5.59; en pluralismo y procesos electorales: 6.92 y finalmente en participación política: 7.22.
El informe consideró como causa fundamental de este fenómeno, los efectos de la pandemia y la limitación que muchos gobiernos impusieron a la circulación de personas, la imposición de vacunas y pruebas, así como el cierre de negocios, y aunque en México no se dieron esas restricciones, pasó de ser un país con una democracia defectuosa a un país con un sistema híbrido, con fuertes rasgos autoritarios, que se explican por la concentración del poder del presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, a la intromisión del crimen organizado en las elecciones pasadas, como lo denunciaron en su momento los partidos de oposición, y a la poca reacción ciudadana, propiciando el regreso del populismo y desafecto a la democracia.
The Economist considera que un factor para la disminución, son las acciones de AMLO y sus reformas en materia de democracia, a que se intensificaron sus ataques contra los medios de comunicación y “se volvió cada vez más intolerante con los críticos", mencionando que buscaría una reforma integral para las autoridades electorales del país, ya que cree que tienen prejuicios contra su gobierno y que están ‘al servicio de la antidemocracia’”.
Y sí, como concluye este importante medio noticioso internacional, el sistema democrático mexicano ha empeorado como consecuencia de los feroces ataques, un día sí y otro también de López Obrador, su gabinete y su partido, al Instituto Nacional Electoral (INE), con amenazas, agresiones y persecución para llevar a la cárcel a los consejeros electorales, particularmente a Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, recortes presupuestales para minar la autonomía y con una posible reforma electoral encaminada a incrementar el control gubernamental, con miras obviamente de incrementar su poder.
Pero México es sólo uno más de los países donde la democracia es decadente y víctima de gobiernos autoritarios, por eso mucha razón tienen Daniel Zovatto, director regional para América Latina y el Caribe en el Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral (IDEA) y el académico Dieter Nolhen de la Universidad de Heidelberg, Alemania, en su participación en el “Foro Global sobre la Democracia”, organizado por el INE, quienes coincidieron en llamar a enfrentar, denunciar y condenar los ataques a los organismos electorales de la región, como el caso del INE en México. "Se debe defender, proteger, tutelar a los organismos electorales frente a los injustos ataques que está recibiendo el INE de parte del presidente Andrés Manuel López Obrador, diciendo que es un organismo costoso, ineficiente y que facilita el fraude. Eso hay que enfrentarlo, denunciarlo y condenarlo".
Y efectivamente, la polarización y el acoso a los órganos electorales, analistas políticos y periodistas que informan los excesos del gobierno de la 4T, ponen en riesgo la democracia de nuestro país. De allí la importancia de que todos los mexicanos respaldemos y protejamos al INE, del autoritarismo, contra viento y marea.
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