Dormir bien es importante para todas las personas, pero lo es aún más para aquellas que, en ocasiones, llevan su rendimiento físico y sus fuerzas al límite, como es el caso de los deportistas. Para los deportistas, el sueño es muy importante por la influencia que éste tiene en el rendimiento físico, la recuperación posterior y en la ejecución de tareas que requieren un buen estado de alerta o concentración. El rendimiento de estos se ve condicionado en ocasiones por un buen descanso, además de una buena preparación física y una correcta alimentación.
La Organización Mundial de la Salud recomienda dormir de 7 a 8 horas diarias. Considerando que una de las funciones del sueño es la restauración del cerebro y del cuerpo, se podría esperar que a más horas de entrenamiento se exija más horas de descanso, sin embargo, las horas de sueño en la mayoría de los jóvenes deportistas no son proporcionales a las horas de entrenamiento. Esto se puede atribuir a que los deportistas tienen dificultad para conjugar sus ocupaciones diarias, trabajo, vida social y familiar, con sus entrenamientos, sacrificando horas de sueño para poder cumplir con todas sus obligaciones.
Los atletas profesionales, quienes viven exclusivamente del deporte, dedican todo su tiempo a entrenar y descansar para mantener elevado su nivel de rendimiento deportivo, pues están conscientes de que son una mercancía que se compra y se vende, cuyo precio depende de dicho rendimiento. Caso contrario el de los deportistas jóvenes que estudian, los que trabajan o realizan ambas actividades, pues en su mayoría tienen otras obligaciones escolares, laborales y familiares además de sus entrenamientos.
Además del estrés, las preocupaciones y el desvío de atención hacia otras obligaciones, también el exceso de actividad física, el sobre entrenamiento, los nervios antes de una competencia y una mala alimentación, puede reducir considerablemente el tiempo de sueño y esto merma poco a poco en las ganas y las fuerzas del deportista y por ende su rendimiento deportivo, esta falta de sueño y el mal descanso conlleva directamente ya no solo al cansancio sino a la falta de concentración en el juego y a las órdenes del entrenador, la disminución de los reflejos y la precisión en el juego.
Ahora, tener una buena alimentación, rica en vitaminas, proteínas, minerales, grasas, carbohidratos, etc., es importante para garantizar que el organismo reciba todas las sustancias esenciales que necesita para cumplir sus funciones, especialmente cuando se practica deporte y el desgaste del cuerpo es mayor, pues con una correcta alimentación se puede mejorar significativamente el rendimiento y la recuperación de los deportistas. La buena alimentación se relaciona con más horas de sueño y viceversa, hábitos inadecuados como no desayunar, comer entre horas, comer poco, se relaciona con menos horas de sueño. Podría decirse que los deportistas que organizan sus rutinas de alimentación también consiguen organizar su tiempo y sus actividades para encontrar tiempo para dormir, o de otra forma, dormir poco se relaciona con dificultades para la organización del tiempo y con hábitos alimentarios poco organizados.
En materia deportiva, dentro de la metodología del entrenamiento encontramos la teoría del Síndrome General de Adaptación o Ley de Selye, misma que de forma general explica que cuando un organismo recibe un estímulo, en este caso, realiza un entrenamiento deportivo, entra en una fase de alarma lo que le produce una fatiga. Posteriormente, el organismo entra en una fase de compensación, donde interviene la recuperación, el descanso e incluso la alimentación, ya que estos factores ayudan a que se recupere la energía, y los nutrientes que brindan dicha energía para volver a entrenar una vez que se encuentre recuperado y esto mismo, da paso a la siguiente fase, que es la de súper compensación, en la que el organismo logra adaptarse y resistir al estimulo anterior, es decir, que la recuperación con ayuda del descanso y una buena alimentación, traerá como consecuencia que el organismo se adapte y el rendimiento deportivo se eleve cada vez más un punto más arriba.
Por eso importante que los entrenadores que se encargarán de masificar el deporte, los mismos deportistas y sus padres tengan en cuenta esto, para que el rendimiento de quienes nos representan sea elevado, que nuestros atletas mejoren día con día en sus entrenamientos, participen dignamente y obtengan buenos resultados en las competencias a las que asistan.
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