La Suprema Corte de México despenalizó el aborto el pasado 7 de septiembre tras una decisión histórica votada por unanimidad de los ministros en pleno, es decir anula la cárcel con la que se castigaba la interrupción voluntaria del embarazo en algunos estados del país. Un hecho histórico sin precedentes que la suprema corte da a las mujeres en México, inicialmente el estado donde se discutía este tema era Coahuila, es decir se declaró inconstitucional la criminalización del aborto en Coahuila y esto a su vez tiene impacto nacional y el criterio será obligatorio para todos los jueces que tengan en sus manos casos que intentan llevar a la cárcel a una mujer que aborte.
Cabe señalar que este acción se discutia sobre un estado del norte de la república que en la última década ha ocupado los primeros tres lugares sobre embarazo en menores edad, habla de la falta de politicas publicas que orienten a los y las jóvenes sobre la eduación sexual integral desde que se es niño hasta el inicio la vida sexual, politicas que tanta falta hacen, no solo en Coahuila si no en todo México por supuesto. Coahuila ha estado seis años en el primer lugar en nacimientos de madres adolescentes, tres años en segundo lugar y un año en tercer lugar, pero nunca ha dejado de aparecer en la lista, los gobiernos estatales que ha tendio Coahuila, pueden presumir de muchos logros politicos, pero definitivamente la falta de eduación sexual es de las cosas que no pueden apraduir, aunque a partir de 2014 el porcentaje de embarazos y nacimientos en madres adolescentes ha disminuido ligeramente cada año en la entidad, Coahuila no ha podido salir de los tres primeros lugares y está lejos de las entidades con los niveles más bajos del país como Nuevo León, Quintana Roo, Querétaro, Baja California Sur y Ciudad de México, que tienen desde cuatro hasta siete puntos porcentuales menos.
Recientemente se publicó el Primer informe de maternidad infantil y adolescente en Coahuila 2019, a cargo de la asociación civil Matatena. Datos revelados por la organización refieren que en 2019 se reportaron 9 mil 948 nacimientos de niñas madres y adolescentes madres, de 11 a 19 años.
En todo el país se practican cada año entre 750.000 y un millón de abortos clandestinos y un tercio de ellos resultan con complicaciones que requieren atención médica urgente. Miles de mujeres pierden su vida con intervenciones caseras o llegan desangradas a los hospitales, donde tampoco suelen encontrar la comprensión del personal sanitario, temeroso de que el Estado en cuestión cargue contra ellos por facilitar el aborto.
El decidir sobre el cuerpo de alguien siempre ha sido y ha estado a cargo de la persona que se vea afectado o afectada, jamás el estado tuvo que criminalizar o condenar sobre decidir en tener o no tener un bebé, poco se habla del sector empobrecido que se ve afectado en todo esto, muchos de los embarazos en menores de edad se desarrollan en entornos populares y marginados, no puedo ser exacto con una cifra, pero en lo que si estoy seguro, es que el embarazo en menores de edad también es un problema de violencia de género, en el cual no se tienen acceso a la información y lo único que se hace es repetir ciclos de pobreza, ciclos de nuevas vidas que vienen al mundo en madres que suelen ser unas niñas todavía, que no tienen los recursos necesarios para darles la calidad de vida que requieran y que por la falta de educación sexual ese es uno de los grandes problemas que existen en un país que ha condenado el aborto como un pecado, en un país donde la religión todavía influye sobre este problema y en un país como México donde miles de personas hablan desde sus privilegios, sin detenerse a pensar en todo lo que hay detrás de aquella mujer que no quiera tener un bebé, todas las razones por las que una mujer quiera detener su embarazo en mi percepción son válidas, no importa si fue por violación o porque simplemente no se siente preparada en traer una vida a la tierra, no importa, es válido y de esto es lo que se busca cambiar en nuestro país con estos derechos.
El aborto legal no obliga a nadie a abortar, es para aquellas mujeres que así lo decidan y es como otros derechos; el matrimonio igualitario no te obliga a ser homosexual, existe para las personas que amen a otra persona de su mismo género, lo mismo pasa con eutanasia, el divorcio y otros derechos, no te obligan, pero están para las personas que así lo deseen llevar a cabo.
¿Qué sigue después de esto?
Salir de las esferas individuales que cada uno tiene, pugnar por la despenalización social, así es empezar a ser activistas del pensamiento de los demás, para que los estigmas que se tienen sobre la práctica del aborto disminuyan, aún hay una gran parte de la sociedad que critica a las mujeres principalmente que apoyan esta práctica, pero como lo dijo mucha de las veces se habla desde el privilegio de cada uno, yo escribo esta opinión hoy con el propósito de llegar a algunos lectores, sin embargos soy muy consiente que esta lucha es únicamente de las mujeres, no de ningún hombre y mucho menos de ningún político, las mujeres han estado en lucha por buscar la igualdad, seguridad y derechos de las mujeres y es por ello que poco a poco el camino se pavimenta para las generaciones que vienen en camino.
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