Hace unos días el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, expresó que a finales del mes de agosto en todo el país se regresaría a clases presenciales e hizo un llamado a los padres de familia para organizarse en este retorno de sus hijos a las escuelas. Y esta postura del presidente sigue siendo la misma a pesar del número de casos que van en aumento en niños y jóvenes, por contagios de la variante Delta.
De acuerdo con el epidemiólogo Gustavo Olaiz, se calculaba que, para finales de agosto, nueve de cada diez casos serían de la variante Delta, esto tras darse a conocer su aparición en el mes de mayo. Sin embargo, esta variante Delta se encuentra ya dentro de la tercera ola de contagios y donde los jóvenes y personas no vacunadas son los principales objetivos de este virus. Los datos enviados en las últimas cuatro semanas a la GISAID (Iniciativa global para compartir todos los datos de influenza) que promueve el intercambio rápido de datos de todos los virus de la influenza y el coronavirus que causa la covid-19, a nivel mundial; reflejan que más de la mitad de las muestras enviadas por México se identifican como variante Delta, el incremento rápido de esta variante se debe a su capacidad de contagio y transmisión rápida en comparación con otras, y por lo mismo en la Ciudad de México, el número de contagios ha ido en aumento.
En la tercera semana de julio, en México, se aumentaron 1.6% (169 casos) los casos positivos en niñas y niños de cero a cinco años, 1.9% (245 casos) en el grupo de seis a 11 años y 1.9% (587 casos) en niñas, niños y adolescentes de 12 a 17 años, es decir mil y un casos nuevos en total. (En una nota publicada por el periódico Excélsior). Más de 56 mil niños, niñas y adolescentes (NNA), se han contagiado desde abril del 2020 hasta julio del 2021, y han fallecido 588. En Querétaro, el 73.9 % de casos activos se concentra en la población de entre los 20 y 40 años de edad, según la Vocería Estatal, mientras que el 47% de decesos en la entidad, por COVID-19, corresponde a estas mismas edades. El 15 de julio, se reportaron seis casos de niños y niñas que dieron positivo a la enfermedad.
Ante tal escenario, resulta increíble que el gobierno de la 4T haga llamados a la población, sobre todo a los padres de familia, para que acepten un regreso a clases presenciales a finales de agosto, a pesar de que el número de contagios va aumentar considerablemente si no se vacuna a la población estudiantil antes. Este llamado irresponsable seguramente, lleva implícito la idea de que no será el gobierno el culpable del alza de contagios, sino la población en general que aceptó enviar a sus hijos a clases. Sin embargo, es necesario decir, que mientras no se acelere el proceso de vacunación para todos los mexicanos, pero particularmente para los estudiantes de por lo menos doce años en adelante, la variante Delta seguirá afectando la salud, ahora de los más jóvenes.
Andrés Manuel López Obrador, asegura que los NNA no deben seguir sin clases presenciales y deben volver a las aulas, sin embargo no se han emitido protocolos que respalden lo dicho por el presidente en cuanto a la revisión de las escuelas, de aquellas que requiere contar con servicios básicos inmediatos como agua potable, drenaje sanitario, energía eléctrica, así como equiparlas con mobiliario y equipo para mantenerlas desinfectadas y todo el apoyo necesario para la prevención y contención del virus en la población estudiantil. Tener a los maestros vacunados, no asegura que se evite su propagación y por lo menos al día de hoy no se ve que las escuelas estén siendo preparadas para recibir a los alumnos en esta modalidad presencial en tiempos de pandemia.
Por mi parte toca decir que si el gobierno de la República tiene un verdadero interés por la educación de los mexicanos y si ya se dio cuenta que su programa Aprende en Casa no sirve y por eso quiere regresar a los estudiantes a las aulas, debe considerar dos cosas: el regreso puede aumentar el número de contagios por la variante Delta de forma considerable, por lo que debe existir un plan inmediato de vacunación para toda la población estudiantil y asegurar que todas las escuelas cuenten con los insumos suficientes para mantener a todos protegidos; y segundo, de no ser así, debe la 4T invertir en internet gratuito para todos los estudiantes y equipos de cómputo, pues sólo así se podrá continuar con las clases a distancia.
De otra forma es muy complicado que el rezago educativo que hay en México pueda retroceder, y ante la falta de soluciones más rápidas, tal parece que a Morena le interesa muy poco la salud y la educación de los mexicanos. Los mexicanos debemos exigir mayor seriedad y compromiso para con estos aspectos, por parte del gobierno federal; pues está claro que con calditos de pollo ni con “el detente” vamos a parar los contagio; ¡todos a clases, pero vacunados!
0 Comentarios:
Dejar un Comentario