Romeo Pérez Ortiz, doctor en física y matemáticas, por la Facultad de Mecánica y Matemáticas de la Universidad Estatal Lomonósov de Moscú, Rusia, explica por qué Antorcha es necesaria en la lucha contra la pobreza en México.
-¿Doctor, cómo se encuentra la situación política de nuestro país?
-La situación política actual en México está muy mal. Partidos políticos van y partidos políticos vienen, y la pobreza y la desigualdad siguen tan fuertes como una roca. Esto es así porque los gobernantes mexicanos no han diagnosticado correctamente el mal que padece México, como el caso de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), que, con todo y el aparato científico que tiene a su servicio, sigue insistiendo que la fuente del mal es la corrupción y que la va a combatir, como se barre una escalera con una escoba, de arriba hacia abajo. Una vez que él y su aparato político acaben con la corrupción, entonces vendrán la abundancia, la paz y luego la felicidad. Pero lo hechos demuestran otra cosa. Ya son tres años de gobierno morenista y cambio alguno no hemos visto los mexicanos. Al contrario, el desempleo, la delincuencia, los robos, los feminicidios han aumentado aceleradamente. No hay medicinas en los hospitales, se han recortado los presupuestos a los ayuntamientos municipales y a las instituciones educativas. En resumen, obras para el pueblo y para sus hijos no habrá en este año y en lo que sigue, pues el mismo presidente lo acaba de anunciar. De la “austeridad republicana” ahora pasará a la “pobreza franciscana”.
-¿Qué se requiere para combatir la desigualdad aquí en México?
-Los estudiosos de la economía política sostienen que para acabar con el mal que ha dejado en pobreza a más de 100 millones de mexicanos, es necesaria la aplicación de una política antineoliberal. Es urgente combatir la desigualdad y la injusta distribución de la riqueza que genera México. Que debe cambiarse una política regresiva por una política fiscal progresiva y canalizar la mayor parte de la riqueza que se junte a las clases populares, pues solamente el 13 por ciento de todo lo recaudado se destina a las clases populares, mientras que a las clases altas, el 33 por ciento.
-¿Hay alguna alternativa para salir del atolladero en el que nos encontramos?
-Sí la hay. Aunque suene muy radical, pero el pueblo pobre y organizado de México debe tomar el poder ya. Ese pueblo organizado es el Movimiento Antorchista Nacional que, de conquistar el poder, combatirá la pobreza y la desigualdad de raíz, pondrá en acción la política fiscal progresiva que aplican otros países como Noruega, Dinamarca, Finlandia, Suecia, etc., y reorientará el gasto social, creando con ello empleos bien remunerados para todo aquel que esté a la edad de trabajar. Dentro de sus proyectos está también el de incentivar la economía, invirtiendo en sectores que propicien el crecimiento económico.
-¿Qué se avecina para México con esta fatal situación, y qué hace el presidente ante esto?
-Para México se avecina una crisis económica y alimentaria. De seguir con la austeridad republicana y ahora con la pobreza franciscana, la desigualdad existente en México aumentará y la pobreza también como nunca visto en ningún periodo histórico de México. Las estadísticas serias muestran que no hay crecimiento económico y de acuerdo con proyecciones de instituciones reconocidas, no habrá crecimiento económico en lo que resta del año; que más bien se acerca una crisis económica, peor que la que se dio en la Gran Recesión del 2008-2009. Pero este análisis no le interesa en lo más mínimo al presidente Andrés Manuel López Obrador como lo mostró en su último informe. El hambre ha comenzado a sentirse y nos estamos acercando a la hambruna como lo han mostrado organizaciones como la ONU, el Fondo Monetario Internacional y el Foro Económico Mundial de Davos, instituciones que sugieren una catástrofe alimentaria a nivel mundial. Pero nada de esto le importa al presidente y su gabinete presidencial.
-Finalmente, ¿qué les dice a nuestros lectores que se han desilusionado durante estos 3 años con el actual gobierno de Morena?
-A todos aquellos desilusionados les digo, que hay un pueblo organizado al que deben sumarse. Hay un pueblo pobre organizado y educado llamado Antorcha al que deben sumarse si realmente quieren cambiar su situación de pobreza. Los antorchistas nunca hemos negado que la corrupción existe y que hay que combatirla, pero siempre sostuvimos que es la concentración de la riqueza en unas cuantas manos la causa primaria de los problemas, mientras que la inmensa mayoría carece de lo más indispensable, el abismo entre ricos y pobres es más profundo con el gobierno de la Cuarta Transformación.
Tan sólo en los últimos dos años en los que azotó la pandemia y hubo crisis en los negocios, la fortuna de las 13 personas más ricas del país aumentó en 33.1 millones de dólares, mientras que 5.4 millones de personas cayeron en pobreza laboral, agravando la situación de aquellas que ya vivían preocupadas por no tener para comer y cubrir los gastos del hogar. La política de la 4T que se dedica a entregar ayudas para el bienestar a algunos sectores de la población, no ha hecho nada más y, esas “ayudas”, por su parte, nunca, en ninguna época y en ninguna parte del mundo, han acabado con la pobreza.
El Movimiento Antorchista reclama a los mexicanos que debemos organizarnos para proteger lo poco que hemos logrado a través de la lucha social y la actuación conforme a los derechos constitucionales que Morena quiere eliminar Por eso invito a toda persona, organización o institución que esté de acuerdo con nuestro proyecto a que se sume para formar un frente común. Ésa es la tarea del momento.
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