Bacalar, Quintana Roo- Cincuenta o 100 pesos diarios, en promedio, cuesta a los estudiantes de Bacalar, pagar su alimentación, pero deben destinarlos al pago de internet; a este dilema se enfrentan todos los días desde que las clases son virtuales por la pandemia de covid-19.
Han solicitado apoyo a autoridades gubernamentales para que los ayuden a pagar este servicio, pero no reciben ninguna respuesta positiva, y en consecuencia recurren a actividades que realizan en las calles para obtener fondos.
"Tenemos gastos que son difíciles de cubrir, como es el internet al que se le tienen que destinar de entre 50 a 100 pesos diarios y así poder tomar las clases en línea. Hemos pedido en reiteradas ocasiones el apoyo de las autoridades de los tres órdenes de gobierno para que nos brinden internet de manera gratuita, pero han ignorado nuestra petición&rdquo, afirmó Russel López Ibarra, líder estudiantil del bachiller de Bacalar.
Para sostener esos gastos, los estudiantes hicieron equipo con los moradores del Albergue Estudiantil Felipe Carrillo Puerto A.C, quienes realizan distintas actividades con la finalidad de recaudar fondos para sufragar su alimentación y su preparación académica debido a que la mayoría de ellos son hijos de familias humildes y provenientes de apartadas comunidades.
Semana con semana, los jóvenes, entusiastas se coordinan para realizar eventos culturales, deportivos, kermeses, así como las colectas públicas con lsa que juntan recursos para salir adelante.
"Lamentablemente no recibimos ayuda de ninguna autoridad gubernamental, tenemos que gastar para comprar saldo, si no hay internet y por lo menos una computadora se dificultan realizar nuestras actividades escolares", expresó López Ibarra.
Además de Chetumal, existen albergues estudiantiles en las cabeceras municipales de Bacalar y Felipe Carrillo Puerto, donde los moradores implementan la misma estrategia para financiar su manutención y formación académica.
El líder estudiantil indicó que, debido a la pandemia, las dificultades en el albergue se han complicado porque el retornó al semáforo naranja complica realizar actividades económicas por las restricciones sanitarias.
Afortunadamente, dijo que los habitantes de la colonia, así como la ciudadanía en general colabora con las actividades que realizan los estudiantes, por ello, invitó a la comunidad estudiantil que tenga limitaciones para continuar sus estudios para integrarse a los albergues que son una opción para continuar sus estudios.
"Nuestro albergue se encuentra en la colonia La Antorcha, aquí no tenemos energía eléctrica, agua potable, prácticamente no hay ningún servicio público pese a las diversas gestiones que el Movimiento Antorchista junto con los habitantes de la colonia han realizado de los cuales ha habido compromiso del alcalde Alexander Zetina Aguiluz, pero que solo fueron promesas que se llevó el viento", asentó.
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