En días pasados se llevó a cabo una reunión con integrantes de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), en la Ciudad de Cancún, en la que estuvo presente el actual Gobernador de Morelos, Graco Ramírez Abreu, quien mencionó el gran esfuerzo del sector empresarial en el combate a la corrupción, pobreza y desigualdad social a través de iniciativas que promueve, como la ley 3 de 3.
De igual manera, en el marco del Seminario Nacional de Formación 2016 de COPARMEX, que se realizó en Baja California el pasado mes de mayo, al cual asistió como invitado de honor, afirmó que "es tiempo de construir juntos una agenda para impulsar el desarrollo económico del país, privilegiando las coincidencias y dejando de lado las diferencias".
Pero me pregunto ¿Cómo es posible qué Graco Ramírez hable de combatir a la pobreza, erradicar la corrupción e impulsar el desarrollo económico, si el Estado de Morelos que él gobierna, es uno de los más marginados del país? La mitad de la población vive en condiciones de marginación, eliminó la revocación de mandato de la Constitución Política del Estado, coartando de manera autoritaria el derecho de los morelenses a fiscalizar, destituir o castigar a funcionarios públicos que no cumplan con su labor social, y aumentó la deuda pública en casi 300%.
¿Realmente el discurso del Gobernador de Morelos, es congruente con sus hechos? No, de lo contrario el Estado a su cargo, sería uno de los mejor gobernados de nuestro país, pero vemos que es 1er lugar nacional en secuestro y también 1er lugar en extorsión por incidencia,
es el 3er estado más violento, pues se han registrado 775 feminicidios desde 2012 a la fecha, y a esta lista le podríamos añadir otros malos resultados de su gobierno.
Otra muestra de incongruencia, es la reciente negativa de querer resolver demandas en materia de obra social, planteadas por del Movimiento Antorchista, que redundarán en beneficio de miles de familias.
El Movimiento Antorchista no está solicitando cosas que no estén dentro del marco de los derechos constitucionales de los mexicanos, está exigiendo lo necesario para que la gente pueda vivir de manera digna, pues sus demandas son en materia de educación, vivienda, salud, infraestructura, apoyo para el campo, etc.
Pero la respuesta del señor Graco Ramírez hacia esta organización, que sí está tratando de combatir la pobreza en México, no es más que una ola de represión y amenazas en contra de los miembros de Antorcha Campesina en el Estado. Como es el caso del pasado 31 de julio, cuando policías detuvieron y golpearon a siete ciudadanos por denunciar el mal gobierno de Morelos, o bien, el día 10 de agosto cuando la líder Antorchista María Soledad Solís, recibió un mensaje donde la amenazaban de muerte, si no dejaba de exigir el cumplimiento de las demandas.
Y digo que el Movimiento Antorchista Nacional si está tratando de erradicar la pobreza, porque lo ha demostrado en Ixtapaluca, Chimalhuacán y Tecomatlán, municipios en los que gobierna y que ha logrado que dejen de estar en los peores lugares de la lista en delincuencia y marginación.
Podemos concluir entonces, que las palabras del Gobernador perredista, no son más que rollos discursivos, pues está claro que su intención no es mejorar la calidad de vida de sus gobernados, sino obtener beneficios propios.
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