Todo 2022, los mexicanos de a pie, los que sudamos sangre, sudor y lágrimas para llevar el sustento a nuestros hogares nos vimos envueltos en un año plagado por el aumento de los precios de los productos de la canasta básica, combustibles, aumento de pasajes, aumentos de los servicios básicos, aumento de los medicamentos, aumento de los materiales para construcción, esto, debido a la alta inflación que sufrimos hace un año, que se mantuvo constante todo el año en “7.07% hasta 8.77%,”, llegando a finales de diciembre con 7.86% de inflación.
Los buenos deseos y propósitos de muchos mexicanos que pensamos que el año 2023 iba a ser diferente y próspero, pero hace unos días nos enteramos a través de los medios de comunicación y las redes sociales que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) nos informaba que el mes de enero cerró con “7.91% a tasa anual”, en contraste con lo que cerró en diciembre de 2022 que fue de 7.86%.
Este aumento en la inflación, sin duda, enciende las alarmas principalmente a los que menos tienen y que de acuerdo con el Coneval, son 55.7 millones de mexicanos pobres y 10.8 millones de mexicanos en pobreza extrema; la cual nos dan un total 67.5 millones de mexicanos con algún tipo de pobreza, de un total de 126 millones 14 mil 24 mexicanos.
Si a esto le sumamos la cuesta de enero y que en muchísimas familias no solo es la cuesta de enero sino la cuesta de todo el año, por el aumento de la canasta básica, pago de servicios, aumento en los combustibles, aumento a medicamentos, aumento al transporte público, impuestos, etc., y por otra parte los salarios de hambre que reciben los trabajadores y para colmo se piensa que con el mísero aumento al salario mínimo va alcanzar a cubrir todas las necesidades de la familia.
El aumento de precios respecto a diciembre de 2022 fue de 0,68%, lo que sitúa a la inflación en su nivel más alto para un mes de enero desde 2001. En cuanto a los alimentos con mayor alza, se encuentran el plátano con un 17.15%, el limón con 16.15%, el pollo con 1.62%, mientras que las taquerías aumentaron sus precios 1.56% y los restaurantes 1.13%, de acuerdo con el reporte.
Pero para colmo de los males, el presidente de México Andrés Manuel López Obrador dijo en la mañanera que hizo en Zapopan, Jalisco, que prevé que la inflación de enero va a ser la última de 2023.
“Yo creo que ya es el último incremento que por cierto no fue muy superior a lo que se esperaba, no llegó ni a un punto, está en 7.7 (mensual), pensamos que va a bajar más, no vamos a dejar de e
Pues pareciera una broma de mal gusto por parte del presidente AMLO, pero para los 57.8 millones de mexicanos que vivimos en pobreza y en pobreza extrema es un tema muy serio que ya vivimos en 2022 y ahora terminando el mes de enero con esta inflación de 7.91% y que de acuerdo con “Banxico aumentó sus previsiones para la inflación. Ahora prevé que quede en los primeros tres meses de este año en 7.7 por ciento; ceda a 6.4 por ciento en el segundo trimestre; baje otro poco más, a 5.3 por ciento en el tercer trimestre, y cierre 2023 en 4.9 por ciento".
Estos problemas de tipo económico, son responsabilidad del Gobierno mexicano, por eso urge que la gente se organice, y se eduque políticamente para luchar hombro con hombro para cambiar de raíz el modelo económico, generador de pobreza y marginación.
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