Según los últimos datos, señalan que los jóvenes protagonizan la tercera ola de coronavirus en México, que, si bien es minimizada por las autoridades porque ha caído el número de hospitalizados y pacientes graves, se refleja en los módulos de pruebas gratuitas de detección de covid-19. Como en los primeros meses de la pandemia, estos lugares tienen por estos días largas filas que en su mayoría están conformadas por jóvenes, en promedio entre los 20 y los 35 años, que aún no han sido vacunados y temen estar contagiados.
Este brote inició en estados turísticos como Quintana Roo, Yucatán y Baja California Sur y se extendió en casi todo el país, y en la última semana en estudio registra un incremento del 29%. Hasta ahora, México ha reportado más de 2.6 millones de casos y rebasa las 235,500 muertes por covid-19, siendo la cuarta nación del mundo por números absolutos de decesos. México ha administrado alrededor de 52 millones de dosis de la vacuna contra el coronavirus con lo que se han reducido las complicaciones y la mortalidad.
Hace unos días, en nuestro país, fueron exactamente los estudiantes de nivel básico quienes exigieron ser vacunados, protestas en los 32 estados de la República fueron la resultante de que el Gobierno mexicano no aplicara políticas de salud y se apresurara al anuncio al nuevo regreso a clases, pues a pesar de que en coordinación con la Federación de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (FNERRR), se visitaron diferentes dependencias de gobierno para pedir la atención, esta fue negada.
Hoy desde BC también se levanta la voz, se pide al gobierno que atienda a los jóvenes y niños, a quienes se les pretende regresen a clases, pero a los que de igual se le envía a un genocidio; aquí donde no hay vacunas y menos condiciones de estudio, pues, aunque el gobierno diga que existen escuelas seguras, ni agua potable tienen en muchas de ellas, ya no hablar de sanitarios.
A los jóvenes; sin embargo, solo les queda avanzar, de manera organizada, exigir que se cumplan con la promesa de primero los pobres, pues a pesar de que se dice que los jóvenes son el futuro, hoy queda más que demostrado que son el presente, ésa es la tarea de la juventud mexicana.
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