Las inacciones o malas decisiones deben ser objeto de visión crítica en cualquier ámbito de nuestra sociedad ya sea para elegir una mala vida o una buena, un buen trabajo o uno mal pagado etc.Todo se basa en decisiones y acciones, pero ese tema de la vida cotidiana se torna mucho más importante cuando son decisiones o acciones que involucran a una sociedad, de un país entero y no solo de la rutina diaria, cuando son de la gran mayoría de la población, de los mexicanos pues.
Enfoquémonos entonces en lo político.En la política, y mucho más en estos días y en estos tiempos que se ven y viven en México, en nuestro país, séase de cualquier partido o color, un presidente siempre en su desempeño debe tomar decisiones y aplicar acciones.Ante todo, hará o tratará de cumplirlas para el beneficio, el bienestar o el futuro de un país, en este asunto, todas las decisiones o acciones del mandatario siempre definirán el futuro de nuestro país.Pues bueno sigamos con lo que comenzamos, la crítica.En colaboraciones anteriores he criticado la mala política y administración de nuestro presidente y su partido, como lo hemos hecho con todos los anteriores; aquí criticamos parejo.Solo escribo como un punto de crítica, y la mía es una opinión más, pero difiere de los que prefieren callarlo, recordando a todos los mexicanos, y es importante tenerlo en mente, la inacción de nuestro presidente con su política anticorrupción de la 4T, a principios de esta mortífera pandemia, lo que hizo y dijo como primer medida de prevención (el corazón de Jesús me protege, salgan a convivir no hay peligro) en vez de actuar con anticipación como otros países lo hicieron, decir que no pasaba nada, que siguieran paseándose, reuniéndose etc.Fue lo primero de su política a la llegada de la covid-19 a finales de febrero a nuestro país, claro, en su momento (hace siete meses) los contagios eran pocos, relativamente nada en comparación con lo que hoy vemos y vivimos.No pasó mucho en que la pandemia le daría cambios drásticos a su "No pasa nada" de la 4T.
El presidente nunca se preocupó en prevenir y reforzar el sector salud, era seguro que traería consigo terribles efectos, ¡vaya! sabia decisión y acción de nuestro presidente.En su momento, intelectuales, medios de comunicación, especialistas escribían lo que el futuro nos depararía, ya se veían venir graves consecuencias en el sector salud, consecuencias con efectos muy deplorables.Han pasado 6 meses de que la pandemia toco puertas en México, lamentablemente nunca se vio disposición del gobierno por querer retenerla y claro, ya estamos viendo esos terribles efectos que desde un momento se predijo.El sector salud en varios estados, en la gran mayoría se ha saturado y no ofrecen verdadera atención médica para salvar a los enfermos de covid-19; la vox populi dice: "no voy al hospital, porque los que entran no salen vivos".Hasta los del sector de salud privado que según son para la clase alta o media en donde, de todos modos, la tasa de mortalidad es menor.¿Cuál ha sido el resultado de ambas partes?, el mismo de toda la vida, los ricos son los menos contagiados, la pandemia ha afectado más a los trabajadores con sólo un salario mínimo al día.
El problema radica en los contagios, como efecto ha traído más defunciones en nuestro país, en números redondos actualmente México tiene alrededor de 70 mil defunciones y es en lo que me enfocaré.Hablar de los médicos o enfermeras u otro trabajador de un hospital, clínica o centro de salud es hablar en pocas palabras y en lo concreto de nuestra salud, ante todo, en lo nuevo que hemos visto durante estos casi siete meses que la gran mayoría han estado al servicio de nuestra salud, ellos juegan un papel muy importante, lamentablemente no han tenido el apoyo suficiente de nuestro presidente, tal como dije líneas atrás, nunca se enfocó en este tema.
La triste y cruda realidad es la que los datos, muy tristes la verdad, nos dan a conocer sobre esas muertes de covid-19 en México, de las 70 mil (cifra hasta el 9 de septiembre) mil 410 hayan muerto intentando salvar miles de vidas, más concretos, el 49% (691) eran doctoras y doctores, el 29% (408) eran trabajadores "con diversas ocupaciones (camilleros y afanadoras), el 18% (255) eran enfermeras, el 2% (28) dentistas y el 2.1% (28) laboratoristas con esos majestuosos datos que al gobierno de México le conviene presumir ante todo por ganarle al imperio norteamericano.Los terribles datos son mil 410 personas (cifra hasta el 3 de septiembre) han muerto intentando salvar miles de vidas más.China tiene 10 veces más habitantes que México, sin embargo, mueren 6 veces más médicos en México que en China.Estados Unidos tiene 328 millones de habitantes, 2.5 veces más que nuestros 127 millones, y Brasil cuenta con 211 millones de personas, 1.6 veces más que México, somos el primer lugar con más muertes en cuidadores de la salud del mundo.
Hasta el 3 de septiembre, la Secretaría de Salud (Ssa) reveló que, de este total, como mencioné arriba, 691 trabajadores en números redondos pertenecían al área médica, el 49%.Es decir, casi la mitad de quienes han perdido la vida a causa del contagio por salvar o querer salvar esas vidas en juegos eran médicos al servicio de la pandemia.La capital de nuestro país Ciudad de México y después Estado de México y Puebla, son las entidades que más han reportado muertes entre personal de salud que se infectó de SARS-CoV-2.Es lamentable y difícil de creer estos graves datos a pesar de que somos un país importante en economía a comparación de otros países de Latinoamérica y se podría decir que unos de los de mayor desarrollo económico.Pero todo queda a manos de los gobernantes, de la política que solo hará y manejará el problema a su beneficio, en este caso de no apoyar al sector salud, por ejemplo, desapareciendo el seguro popular, que era lo único que muchas familias de escasos recursos tenían para atender su salud.
¿Qué más nos deparará el futuro? Tal vez en unos cuatro años más acusemos al gobierno de la "4T" de una masacre en contra de los médicos y cuidadores de la salud, ellos dieron su vida durante la pandemia, y México está de luto por esos mil 410 médicos y enfermeras muertos: fueron, en promedio, 235 vidas y familias mutiladas por mes, casi 8 por día (7.8), una cada tres horas y, mientras, el gobierno se ocupa de enjuiciar a ex presidentes y políticos… en esta vida y más en lo político, el karma y el castigo llega.Esa mala política se verá reflejada en las elecciones del 2021, el futuro es predecible pero siempre intentarán cambiarlo.¿Podrán? La moneda gira en el aire, aún habrá definición, pero sus malas decisiones y sus criminales resultados no desaparecerán con la elección.
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