Sin cesar un día, la variante Ómicron mantiene su imparable proliferación en México, confirmando que el país avanza rumbo a lo alto de la curva tal y como sucede en el resto del mundo. Hasta el momento, nuestro país se mantiene en el decimosexto lugar en el mundo en número de contagios confirmados y en el quinto con más decesos detrás de Estados Unidos y Brasil.

En lo que va de este año, México arrancó con la peor cifra de contagios de covid-19, pues se dio un alto índice de contagio, debido a que se registraron 10 mil 864 nuevos casos. En el último mes de 2021 se había registrado casi 300 mil casos activos y duplicado la ocupación de camas hospitalarias.

A escasos días de concluir el 2021, México registró casi 18 mil casos activos de Covid-19. En este periodo, la hospitalización se duplicó al pasar de 15 por ciento a 29 por ciento, mientras que la hospitalización en estado crítico, o sea que necesitan ventiladores, creció cinco puntos y pasó del 12 por ciento al 17 por ciento. En los primeros nueve días de enero hubo más de 4 mil niños contagiados, según el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), un 4.3 por ciento más de lo reportado hasta el 31 de diciembre del año pasado.

A pesar de los datos y las advertencias, que han hecho especialistas, las autoridades federales, a la cabeza el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, han minimizado el problema que esta variante impacta entre los mexicanos, hace unos días el mandatario se contagió por segunda vez de Covid, al no manifestar gravedad en su salud, redujo esta variante Omicrón como un “covidcito”, una simple gripe, “o sea que no tiene la potencia que tenía la variante Delta”. También recomendó a las personas que tengan síntomas que se queden en casa, tome paracetamol y se aíslen en lugar de salir y tratar de hacerse una prueba diagnóstica. Esas afirmaciones del mandatario federal es una burla para los mexicanos quienes no contamos con recursos suficientes para ir a clínicas particulares para recibir un buen tratamiento, pues los hospitales públicos han colapsado por el contagio excesivo que se ha presentado en lo que va del año, pero bueno, cuando menos ya no mencionó sus estampitas, pues al parecer no le dieron buenos resultados.

También llama la atención la forma despectiva que el Secretario de Salud Federal, Jorge Alcocer, manifestó ante este problema, indicando que a los niños les bastaba con “VicVaporub y paracetamol” para tratarse el contagio, es lamentable ver el poco interés y la baja preocupación que el sector salud denota, con esta actitud queda claro que la salud no está garantizada para los hijos de los trabajadores.

A pesar de los datos arriba mencionados de los contagios que se presentan en los niños, en algunos estados se siguen autorizando las clases presenciales, sin tener la mínima importancia de prevenir el contagio.

Nos encontramos ante un gobierno incompetente, que lejos de darle alternativas y garantizar la salud de los mexicanos solo minimiza la gravedad del problema que hoy vivimos los mexicanos.

Por lo anterior, es importante que se garantice la salud de todos los mexicanos, las vacunas deben bajar a todo el sector de la población, sin seguir retrasando su aplicación, que haya suficientes espacios en los hospitales y medicamentos adecuados que puedan ayudar a amortiguar esta crisis de salud para que los que menos tienen puedan enfrentar la pandemia.