La difícil y preocupante situación en la que nos encontramos y que, como persona con un mínimo grado se sensibilidad y humanismo, consciente y preocupado por lo que vivimos miles de millones de seres humanos en esta tierra, tal vez, sin llegar a la conciencia de aquellos que dado su poderío económico y político tienen la posibilidad de corregir esta situación, pero con la esperanza de entrar en la mente de aquellos que han sido desamparados toda la vida, me atrevo a escribir sobre lo que pasa en estos tiempos, tratando de hacer conciencia para cambiar esta situación.
El último informe presentado por la OXFAM publicado el 25 de enero del 2021 dice: "La pandemia del coronavirus tiene el potencial de agravar la desigualdad en prácticamente todos los países del mundo al mismo tiempo. El virus ha puesto al descubierto y ha exacerbado las desigualdades económicas de género y raciales a la vez que se ha alimentado de ellas. Mas de dos millones de personas han perdido la vida y cientos de millones se están viendo arrastradas a la pobreza, mientras la mayoría de las personas y empresas más ricas del mundo siguen enriqueciéndose. Las fortunas de los milmillonarios han recuperado el nivel previo a la pandemia en tan solo nueve meses, mientras que para las personas en mayor situación de pobreza del mundo esta recuperación podría tardar más de una década en llegar”.
Veamos. El virus ha golpeado un mundo que ya era profundamente desigual. ¿Qué ha pasado con la desigualdad ahora con el coronavirus? A nivel mundial, la fortuna de los milmillonarios aumento en 3.94 billones de dólares entre el 18 de marzo y el 31 de diciembre del 2020. Su riqueza conjunta asciende ahora a 11,95 billones de dólares lo que equivale a la suma que los gobiernos del G20 han movilizado para responder a la pandemia. Si escarbamos un poco mas profundo, los 10 milmillonarios más ricos del mundo han visto crecer su fortuna en 540,000 millones de dólares durante este periodo. En contraste con esta situación: ¿qué ha pasado con los pobres? Vemos que cientos de millones de personas han perdido sus empleos, y se enfrentan al hambre y la pobreza extrema como consecuencia de la pandemia. Por un lado, los ricos se hacen más ricos y por el otro, los pobres cada vez más pobres. Se estima que el número total de personas en situación de pobreza podría haber incrementado en 200 y 500 millones de personas en 2020. Tendrán que pasar 10 años para que puedan mejorar su situación de pobreza.
Ahora bien, ¿qué pasa en México? La situación es aún más complicada que en el resto del mundo. Hay 1,912,151 casos confirmados de covid-19 y 164,290 personas han perdido la vida y se estima que puede empeorar dado que para inmunizar a toda la población al ritmo que van necesitan 8 años y 9 meses, situación que nos llevara a que miles de personas se contagien y muchos más puedan perder la vida.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) dice que México se ubica en el primer lugar en desigualdad salarial. A pesar de que la mayoría de los millonarios mexicanos vieron afectados su fortuna, no deja de ser escandaloso el abismo que existe entre ricos y pobres, el mas beneficiado con esta pandemia fue Ricardo Salinas Pliego, en buena medida por obtener contratos con la 4T. En 2019 el empresario tenía una fortuna de 11,100 millones de dólares y ahora posee una riqueza de 11,700 mdd, 600 millones de dólares más en medio de una pandemia que ha cobrado miles de vidas en un país donde la inmensa mayoría de la población sufre pobreza, marginación y hambre.
El fenómeno de la desigualdad, que desde hace más de 40 años, se ha venido agudizando, y que los que tenemos que hacer conciencia y ahora más por la pandemia, que los dueños del poder político y económico no harán nada al respecto por combatirlo, dado que su interés es el afán de ganancia y no de mejorar las condiciones de vida de la clase marginada y que ni los gobiernos en turno, mucho menos los milmillonarios, nunca cederán su fortuna para sacar de la pobreza a los miles de millones de pobres en este planeta y que por lo tanto, somos los pobres de esta patria y del mundo entero los que debemos combatirla; en estas elecciones que se avecinan, todos los que han perdido su empleo, o algún familiar a causa de la pandemia, y que el gobierno no ha hecho nada para ayudar, se disponga a elegir nuevos representantes en el congreso federal y en algunos estados en las cámaras locales, así como presidencias municipales. Ahí se tiene que cambiar el rumbo del país en general. La tarea es indispensable si queremos mejorar las condiciones de vida.
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