En el mundo en que vivimos, con lo cotidiano de los problemas y la premura de sobrevivir, no reparamos en que nuestro país es uno de los 20 más ricos del planeta. México es la economía número 16 de alrededor de 200 países y muchos mexicanos no lo sabemos.
Sólo 15 países producen más riqueza que México; sin embargo, debido a la mala distribución de la riqueza, la pobreza aumenta de manera escandalosa, día con día, y pareciera que lo único que podemos hacer es resignarnos, pero no es así.
Hay ejemplos de cómo es posible tener una mediana comodidad para todos los habitantes de un país, pero lo desconocemos porque, a nosotros, a los trabajadores, casi no nos llegan noticias de otros continentes por así convenirlo a los dueños de los grandes medios informativos, la máxima aspiración que se nos permite es el sueño americano; es decir, irnos de mojados a los Estados Unidos (EE. UU.), pero en el mundo existen pueblos y gobiernos con mejores resultados para los trabajadores que los que tenemos nosotros; veamos algunos botones de muestra. Mientras en México se priorizan obras como un aeropuerto que sólo usará, en el mejor de los casos, el 8 por ciento de los mexicanos, en China se construyen hospitales en tiempo récord (10 días) para enfrentar la pandemia y evitar al máximo el número de muertos; y dio resultado.
Mientras que, en México, con casi 130 millones de habitantes, hay oficialmente alrededor de 325 mil muertos, en China, con mil 400 millones de habitantes (más de 10 veces nuestra población), lleva aproximadamente 5 mil 100 muertes; mientras China sacó de la pobreza extrema a 800 mil chinos en un plazo de cinco años; en México, en dos años de pandemia, han incrementado en cuatro millones el número de pobres.
A Rusia, a pesar de los fuertes ataques de que han sido víctimas sobre todo en los últimos tiempos, le debemos el haber librado al mundo de la amenaza nazi y se ha dedicado a reconstruir su patria e instruir a su población; los rusos tienen derecho a que el Estado pague su educación desde el inicio hasta el nivel licenciatura, ya si desean hacer una segunda carrera es por cuenta del alumno; en este país reciben anualmente el grado de doctor 33 mil rusos, además de que cuentan con una basta investigación científica, por lo que no es raro que hayan sido de los primeros en desarrollar una vacuna contra el SARS-CoV-2 en tiempo récord.
En México la educación básica es obligatoria y gratuita, según lo establece la constitución mexicana en su artículo 3, pero en los hechos sigue siendo letra muerta, pues hay miles de escuelas sin las condiciones mínimas para trabajar, millones de niños y jóvenes sin estudiar y ahora con la pandemia desertaron alrededor de 5 millones de estudiantes de los diferentes niveles educativos, eso sin olvidar que, con el pretexto del ataque a la corrupción el gobierno federal acaba de eliminar las Escuelas de Tiempo Completo que eran una verdadera ayuda para las familias de nuestro país, en vez de universalizar dicho programa y lograr la retención escolar, en México reciben el doctorado 3 mil mexicanos (11 veces menos que los rusos).
Estos son sólo algunos ejemplos de cómo otras sociedades obtienen logros importantes en su beneficio, ¿Acaso los mexicanos somos menos trabajadores, inteligentes o audaces? No, de ninguna manera, somos de los más trabajadores en el mundo y tan capaces como cualquiera, la prueba es la enorme cantidad de riqueza que somos capaces de producir, el problema es la forma en que ésta se distribuye, por lo que es necesario modificar esa distribución inequitativa por una justa y equitativa, pero esta gigantesca tarea sólo la podrá lograr el pueblo organizado, educado y dispuesto a luchar por conquistar un mundo mejor.
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