Durante el tiempo que duró la pandemia por la covid-19, nos vimos obligados a suspender todo tipo de eventos para salvaguardar la salud de nuestros compañeros, ello incluyó la cancelación de nuestros eventos deportivos y culturales que realizaba e impulsaba el Movimiento Antorchista Nacional, a lo largo del país y del año, entre esos eventos se encontraban nuestras Espartaqueadas, tanto deportivas como culturales.
Durante este tiempo, las canchas de la impresionante unidad deportiva y la alberca semiolimpica que durante más de 20 años habían sido mudos testigos del mar de juventud que por ahí desfilaba, permanecieron calladas y en silencio, pero ahora, del 6 al 14 de mayo, toda esta infraestructura deportiva volverá a cobrar vida y abrirá sus puertas a más de 20 mil deportistas que acudirán, con esa alegría que caracteriza a los jóvenes, desde todos los puntos del país a un encuentro completamente fraterno, camaraderil y sin fines de lucro.
La preparación de todos los competidores es algo que no se logra de un día para otro, se necesitan meses de práctica, empeño y sacrificio para poder obtener el nivel que una competencia de carácter nacional requiere, pues debe destacarse también que año con año, los deportistas han elevado su nivel y todo aquel que acude hace todo su esfuerzo para ponerse a la altura; niños y jóvenes que acudirán desde Baja California y Yucatán, y que se reunirán en la Atenas de la Mixteca, serán testigos de todo lo que ha logrado el pueblo organizado.
Y digo esto porque aquella joya que se encuentra en la Mixteca Baja poblana, un pequeño pueblo que destaca por mucho entre todos los que lo rodean, es el fruto de la lucha que el pueblo organizado ha llevado a cabo por casi 50 años y se ha vuelto el botón de muestra de lo que el antorchismo nacional busca conseguir en todo el país; un pequeño pueblo que cuenta con todos los niveles de educación, donde todos pueden iniciar desde preescolar hasta terminar una carrera, un pueblo con todas sus calles pavimentadas, donde todos los habitantes cuentan con todos los servicios básicos, donde todos tienen empleo y donde, debido al nivel cero de violencia que ahí se vive, su policía cuenta con tan solo 14 integrantes y ninguna cárcel.
Este pequeño y a su vez gigantesco pueblo cobrará vida con los deportistas desde los primeros rayos del sol hasta que la noche caiga, pues muchas de las competiciones inician a las seis de la mañana y van terminando sus jornadas, a veces, hasta las 11 de la noche, en cada hora que pasa, las canchas se llenan de estudiantes, colonos, campesinos, amas de casa, quienes pueden llegar a disfrutar de partidos y competencias de gran calidad, completamente gratuitos. Esto es lo que logra Antorcha.
A esta gran justa deportiva, indudablemente, acudirá también la representación de los michoacanos, un contingente de 750 deportistas que cubrirán todas las categorías y ramas, hará su mejor esfuerzo para posicionarse entre los primero lugares de la tabla general.
Pero así como se destaca el trabajo y esfuerzo de todos los deportistas, es también necesario reconocer el mismo esfuerzo, sacrificio, amor, cariño y abnegación que está detrás de todo este gran evento; desde la propaganda, camiones que trasladen a los deportista y comisiones de apoyo, la comida, el hospedaje y toda la cobertura del evento en general; todo lo que se consigue se logra gracias a las colectas, actividades económicas y gestiones ante diferentes niveles de gobierno que impulsan y encabezan los antorchistas de todo el país.
Desde que surgió nuestra organización se tuvo bien claro que algo fundamental para nuestro crecimiento y desarrollo era precisamente la independencia económica, esto quiere decir, que con las limitantes propias de la vida y de las circunstancias sociales, debíamos buscar todas las alternativas necesarias para sacar adelante nuestra lucha y nuestros eventos, el mismo crecimiento y desarrollo natural de nuestro movimiento, así como de quienes al igual que nosotros luchan por una mejor patria y se sumaron a nuestras filas, logró que empezáramos a construir pequeños negocios, cuyas ganancias no serían para una persona o un grupo de personas, sino para todas las actividades necesarias de una organización social.
A pesar de la tierra que se nos ha echado encima, a pesar de las calumnias que en nuestra contra se han emitido desde hace casi 50 años, después de las más 200 calumnias que personalmente el presidente de la república ha emitido en nuestra contra, hoy, con los hechos, podemos demostrar que el trabajo de nuestra organización es un trabajo honesto y que tiene sus propias bases en el desarrollo y esfuerzo de todos los que en ella militamos.
Así que si existen aun personas, como estoy segura de que así es, que dudan aún de todo el trabajo que realiza el antorchismo, esta será una buena alternativa para que nos conozcan de cerca y personalmente, para que vean, de primera mano los eventos que organiza e impulsa el Movimiento Antorchista Nacional; Tecomatlán con sus grandes obras que impactan a cualquiera que las ve por primera vez y que están a la vista y al servicio de todos, los recibirá, como todos los antorchistas, con los brazos abierto. Ahí nos vemos.
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