Jalisco es el tercer estado más poblado de México, con 8 millones 348 mil 151 habitantes, según datos del INEGI. La distribución poblacional se inclina hacia el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG), donde 10 municipios albergan el 63 por ciento de los habitantes del estado; el 37 por ciento se distribuye en los 115 municipios restantes. La tierra del tequila ocupa el cuarto lugar en la contribución a la riqueza nacional; aporta el 7.5 por ciento al PIB nacional. Jalisco es un estado muy extenso y juega un papel fundamental en cuanto a la generación de la riqueza nacional. Tenga usted en cuenta estos datos a lo largo del texto.
Necesitamos que la clase trabajadora de Jalisco se organice en un bloque que defienda sus verdaderos intereses, que no siga siendo víctima de los cantos de sirena de uno u otro, que en el dicho la apoyan, pero en el hecho la desgarran y humillan
La situación estatal no es ideal; aunque se intenta maquillar entre distintas inversiones extranjeras, edificios de primer mundo, diversas zonas industriales, obras impactantes o tras algunos calificativos como que Jalisco es el "Silicon Valley" de México, la cruda realidad, esa que viven cientos de personas todos los días, es distinta. Aunque el estado cuenta con abundantes recursos, no todos tienen acceso a ellos. Solo el 33 por ciento de la población del estado, es decir, apenas 2 millones 754 mil 890, pertenece a la categoría, según datos del INEGI, de no pobre y no vulnerable, es decir, aquellos que tienen un ingreso superior a la línea de bienestar y no presentan carencias sociales de ningún tipo. Por otro lado, la mayoría, o sea, el 66 por ciento, padece carencias de todo tipo.
Si usted tiene dudas y se encuentra en la disyuntiva por saber a qué grupo pertenece, si al 33 por ciento de los jaliscienses privilegiados o al 66 por ciento no privilegiado, vea lo siguiente: Primero, Jalisco es el segundo estado en el país en recibir remesas, y según el Instituto de Información Estadística y Geográfica (IIEG), en una gran proporción son utilizadas para pagar servicios básicos o para poder completar el gasto corriente de las familias. ¿Usted utiliza las remesas de esta manera? Segundo, hay 70 mil 798 créditos del Infonavit en cartera vencida en el estado, es decir, deudas que no fueron pagadas en tiempo y forma. ¿Usted está en esta situación? Tercero, según datos del INEGI, solo 2 de cada 10 jaliscienses cuentan con un mecanismo de ahorro; recordemos que el ahorro no solamente es una cuestión de voluntad, sino de tener el ingreso suficiente para poder efectuar dicha acción. Y, por último, la Encuesta Nacional sobre Salud Financiera (Ensafi) 2023 muestra que para vivir en Jalisco y cubrir los gastos básicos se necesita un ingreso promedio de 18 mil 500 pesos. ¿Usted percibe ese ingreso?
Siguiendo con los resultados de la encuesta, diremos que el 58 por ciento de la población tiene algún nivel de estrés financiero. Este estrés se genera por la preocupación existente en las familias relacionada con temas económicos, por ejemplo, cuando el dinero no alcanza y contratan deuda, cuando se gasta más de lo planeado, cuando los pagos vencidos se acumulan, cuando el dinero se va en imprevistos, no se puede ahorrar o es imposible tener espacios de entretenimiento. Las repercusiones van desde reducir gastos, utilizar los exiguos ahorros, solicitar adelanto de salario, trabajar horas extras y vender o empeñar pertenencias. ¿Usted ha recurrido a alguna de las acciones mencionadas?
Hasta aquí usted tiene los elementos para ubicarse en el bando correspondiente. ¿Y ahora qué sigue? Primero, ubicarnos correctamente. Segundo, recordar la gran importancia que tiene nuestra clase trabajadora; recordar que la fuerza de trabajo es fundamental para la producción. Sin ella, la vida, desde la alimentación hasta el transporte, se detendría. La clase trabajadora es la base sobre la cual se construye la economía, transformando los recursos naturales en mercancías. O sea, en riqueza. Sin embargo, los dueños del capital tienden a valorar más las ganancias, a menudo considerando la mano de obra como un simple insumo que debe comprarse al menor costo para maximizar los beneficios.
Debemos proponernos buscar la distribución equitativa de la riqueza, tener empleos para todos en edad de trabajar y bien pagados, situación que corresponde a todos los patrones del estado y a transformar las condiciones materiales en las que vivimos, tema que corresponde al gobierno federal, al estatal y al municipal; necesitamos que la clase trabajadora de Jalisco se organice en un bloque que defienda sus verdaderos intereses, que no siga siendo víctima de los cantos de sirena de uno u otro, que en el dicho la apoyan, pero en el hecho la desgarran y humillan, necesitamos que participe de manera activa en la solución de sus problemas, que se reúna y logre cambios sustanciales para el entorno en el que vive, que no se limite su participación a sólo acudir a las urnas de vez en cuando. La realidad nos lo exige; recuerden que no hay ni más agua, ni más drenaje, ni más transporte, ni más pavimento, ni más escuelas, ni menos contaminación, ni más educación de calidad, ni más alumbrado público, ni más apoyo para el campo, ni menos inseguridad. Nada. Las cosas están igual o peor que antes.
Comerciantes, pescadores, choferes, obreros, herreros, campesinos, albañiles, productores de leche, amas de casa, trabajadoras domésticas, agaveros, estudiantes, artistas, jimadores, cajeros, agentes de ventas, entrenadores, promotor de ventas, ganaderos, recicladores, y todos aquellos que solo tienen su fuerza de trabajo para poder venderla y sobrevivir, los invitamos a organizarse en el Movimiento Antorchista en Jalisco. Los invitamos a luchar para transformar las condiciones de vida de los más desamparados del estado y del país; mañana puede ser demasiado tarde.
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