En los últimos ciclos agrícolas se han visto afectaciones a todos los agricultores; tan contundentemente como para que se reduzca el deseo de continuar con esta noble actividad económica. Sale caro invertir en el proceso de la siembra y el tema de comercialización es aún más complicado; así, las utilidades o ganancias se reducen cada año que pasa.
Para poder echar a andar el trabajo en la parcela o el campo en la región lagunera de Durango y de Coahuila, se requieren maquinaria y recursos para poder contar con utilidades significativas, pero un campesino tiene que pagar por los trabajos de preparación de tierra y hasta rentar lo que llaman “la humedad”, lo que aumenta su costo de producción. Esto es un factor u obstáculo enorme con el que, al pasar el tiempo, se sigue reduciendo el número de ejidatarios; se incrementa el número de potentados y de pequeños propietarios.
Lo que está afectando actualmente en la región lagunera, son las lluvias en estas fechas. Sin embargo, los algodoneros han manifestado que se les ha perjudicado también con un insumo que se les vendió por el proveedor, que es la semilla que, aseguran los productores, les dejará una producción muy reducida y les causará una pérdida, ya que ni siquiera la inversión o los costos de producción podrán obtener.
Ante esta situación, pareciera que no hay alguna autoridad que meta las manos en esta problemática. Los productores han manifestado que es la casa proveedora la que tiene la responsabilidad de no hacerles llegar una semilla o tipo con males genéticos. Ahora es urgente que se les resuelva para que no salgan con problemas económicos.
A muchos de los productores es el segundo año que se les afecta con una semilla de mala calidad, o que no es para la región lagunera de Durango y de Coahuila.
Incluso se habla de que a muchos de los productores es el segundo año que se les afecta con una semilla de mala calidad, o que no es para esta región y sus calores contundentes.
Los campesinos han manifestado que harán lo debido para salir adelante y llevar este problema hasta las últimas consecuencias, debido a que son miles de hectáreas las que están afectadas y cientos de productores que se verán con pérdidas en sus inversiones, pero es necesario que la instancias que entregan las semillas emitan algún documento donde se hagan responsables de esta problemática que traen a los campesinos, a los productores.
De no darse una solución pronta, se vendrá una serie de irregularidades entre los productores de algodón, quienes están dispuestos a irse a la instancia o nivel gubernamental correspondiente para que les resuelvan, ya que el algodón es el cultivo que equilibra la producción agrícola en muchos municipios de la región lagunera de Durango y de Coahuila.
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