Centla, Tabasco. Fueron muchos años que un sector importante de la colonia Caparroso desarrollaba sus actividades en la oscuridad, ya que el servicio de energía eléctrica no abarcaba la zona donde cientos de familias levantaron sus humildes viviendas con el trabajo y esfuerzo de muchos años.
Con el crecimiento del asentamiento, se hizo necesaria la introducción de servicios públicos para la gente, como agua potable, servicios de salud y educación, entre otros; sin embargo, la electrificación era un pendiente debido a la alta inversión de recursos públicos que se necesitaba para llevar a cabo la obra.
Cansados de la indiferencia de las autoridades que simplemente ignoraban las decenas de solicitudes por escrito que hacía llegar a las oficinas gubernamentales, decidieron solicitar el apoyo del Movimiento Antorchista Nacional, a sugerencia de un residente de la colonia Simón Sarlat, que ya había sido testigo de los frutos de la lucha organizada.
La lucha se emprendió, y al cabo de un año de intensa labor, visitando dependencias de los tres órdenes de gobierno, los ánimos no cejaron, hasta que la organización de los pobres de México logró que se destinaran recursos federales a la anhelada obra de electrificación, beneficiando a miles de centlecos.
"No vinieron a prometernos nada, simplemente nos organizamos con Antorcha y decidimos luchar hasta ver las calles de la colonia bien iluminadas, y aquí están los resultados", señaló don Antonio Pérez, vecino de Caparroso.
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