Dice un refrán muy popular: “no sólo de pan vive el hombre”. Esto se refiere a que para que el ser humano tenga una vida plena y satisfactoria en todos los sentidos, no basta con cubrir las necesidades básicas materiales, como el alimento, el vestido, el calzado, la habitación, etcétera, sino que también es necesario alimentar su espíritu con conocimientos filosóficos, científicos, técnicos y artísticos.
Esto no es un tema nuevo, es algo consustancial al desarrollo humano, al desarrollo social. Desde tiempos muy remotos, podríamos decir desde que el hombre primitivo tuvo la necesidad de expresar sus sentimientos y pensamientos, así nos lo muestran las diferentes expresiones artísticas encontradas en cuevas y otros sitios arqueológicos esparcidos por el mundo.
A través del tiempo, el hombre fue ampliando sus expresiones espirituales con religión, filosofía, escultura, arquitectura, baile, danza, poesía, y teatro.
En los tiempos actuales, el arte, que antes era una expresión colectiva de sana convivencia, se ha elitizado; es decir, sólo los grupos privilegiados económicamente pueden disfrutar del buen arte. La clase dominante (léase burguesía) lo ha convertido en negocio y, lo que es más grave, ha deformado las expresiones artísticas para sus fines de manipulación de las masas trabajadoras, corrompiendo a la juventud con "eventos culturales" que solo los inducen a la violencia, la drogadicción y la prostitución. Ejemplo de ello son el reguetón y los narcocorridos.
Nunca ha sido una prioridad para los gobernantes pasados y presentes el tema de la cultura para el pueblo, basta con ver lo que se destina del presupuesto y lo que se hace en las escuelas de educación básica, el primer nivel de formación del capital humano. El actual Gobierno federal morenista sólo destinó el 0.19 % del presupuesto federal a la cultura, prácticamente nada; en las escuelas de educación básica, brillan por su ausencia los maestros de educación artística.
Decía el poeta y libertador José Martí: "ser culto para ser libre", y es esto seguramente lo que motiva a la clase dominante a no darle cultura suficiente al pueblo, porque un pueblo culto reclama y exige su derecho a una vida mejor.
Por eso es muy valioso lo que hace el Movimiento Antorchista Nacional a lo largo y ancho del país, al fomentar la práctica artística con niños, adolescentes y adultos, y al llevar al pueblo ese mismo arte, para que a través de él tome conciencia de que la vida no se reduce a trabajar y trabajar produciendo bienes materiales para el enriquecimiento de unos cuantos, sino que amplíe su horizonte hacia una vida mejor que lo libere de las cadenas de explotación que sufre en largas jornadas de trabajo con sueldos miserables.
Para contribuir a ese despertar del pueblo al disfrute de las bellas artes, los artistas formados por el Movimiento Antorchista realizan una gira por el noroeste del país. El jueves 14 de marzo a las 5 p. m., se efectuaría el evento artístico en Culiacán, a un costado de la Catedral, y el miércoles 20 de marzo en la Plazuela 27 de septiembre de la ciudad de Los Mochis. Están todas y todos invitados; no falten.
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