Ante la abrumadora maquinaria electoral implementada desde las más altas esferas del poder, de la capacidad mediática para imponer la idea de un México próspero y en bonanza, dar una opinión diferente a lo que al vulgo le ofrecen a diario, pareciera una actitud contra natura. No es así, la realidad es muy diferente a lo que ofrecen los medios para encumbrar los éxitos de un gobierno que en en verdad son pocos si hacemos un balance realista sobre los dividendos presidenciales, pero de los que ya poco se habla ante la euforia de los resultados electorales, ergo: el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, el Tren Maya y la Refinería Dos Bocas Olmeca.
Como en los tiempos del otrora poderoso PRI, hoy emigrados al partido gobernante, Alfredo del Mazo, correligionarios y no correligionarios, el carro completo cubrió de un manto guinda el país. 24 estados gobernará el partido de AMLO; cuatro permanecen bajo un gobierno panista (Aguascalientes, Chihuahua, Guanajuato y Querétaro; perdieron Yucatán); el PRI se mantiene en dos (Coahuila y Durango); MC gobernará dos estados (Jalisco y Nuevo León), según el diario AS, del 4 de junio de 2024.
Con base en la información publicada por el INE en su página, con corte al 8 de junio, sobre los resultados de las elecciones a la Presidencia de la República, la ganadora, Claudia Sehienbaum, obtuvo 36% de la votación, tres puntos porcentuales más que su antecesor, AMLO, hace seis años. 35.9 millones de electores votaron por la virtual presidenta de la República Mexicana. Un dato importante es la diferencia de los padrones 2018-2024, 89.1 contra 98.4 millones de electores más. De los 9.3 millones de nuevos electores no todos votaron por Morena, a pesar de las becas a los “ninis”.
En la página de AMLO, el 30 de mayo de 2023 se publica: “El coordinador general de Programas para el Bienestar, Carlos Torres Rosas, detalló que accederán a estos, 25 millones 624 mil 254 personas durante 2023 con una inversión histórica de 598 mil 10 millones de pesos”, impresionante la cantidad de beneficiarios e igualmente la cantidad de dinero del erario público o producto de empréstitos extranjeros, el que se utiliza para el sostenimiento de los programas presidenciales. Así que, la cosecha electoral no fue tan buena como se supone.
“¿Quieres que sigan los apoyos?”, una evidente violación a la reglamentación electoral.
Más aún, cuando el abstencionismo pasó del 36.4 al 38.9 %, dos punto cinco por ciento de los mexicanos decidieron, en esta ocasión, no acudir a votar, no olvidemos los millones de dineros y de gente, potencialmente comprados con una beca o un apoyo directo.
Dos casos para la reflexión. Chimalhuacán, con una lista nominal de 513 mil 126 electores, a las urnas acudieron a votar 256 mil 179 chimalhuacanos, 49.9 %. La relección de la morenista, Xóchitl Flores, ganó con el 27 % de la preferencia de los ciudadanos en edad de votar y el 54 % de los votantes; en Ixtapaluca, donde la lista nominal asciende a 377 mil 797 electores, acudieron a votar 219 mil 671, lo que representa el 58.1 % de ciudadanos que acudieron a sufragar su voto; el abstencionismo alcanzó, en este municipio, 41.9 %, la fórmula ganadora, encabezada por otro candidato a la reelección, Felipe Arvizu, del partido Morena, obtuvo 81 mil 351 votos, con apenas el 37 %, un buen servicio le proporcionó el PVEM en este municipio, que fue un factor importante para que la fórmula del Luis Arreguín, de la coalición PRI-PAN-PRD, no viera coronado su esfuerzo por llegar a la presidencia municipal.
La similitud de estos dos municipios es la impopularidad y la falta de trabajo de los candidatos de Morena que buscaron la reelección; de nada valieron las protestas de sus mismos correligionarios, como ocurrió con Xochitl Flores en Chimalhuacán, donde unos 2 mil simpatizantes de Morena se manifestaron en contra de la candidatura de la entonces presidenta municipal, en la que denunciaron el ejercicio del poder despótico de la munícipe, junto con su marido, Miguel Benito, así como la falta de obra pública “pese al presupuesto de 2,500 millones de pesos asignados para este municipio”, de lo que diera cuenta El Valle, de fecha 29 de marzo.
Los problemas de abasto de agua potable, es otro tema en el que comparten destino, tanto chimalhuaquenses como ixtapaluquenses. Desde que asumieron ambos gobernantes municipales, los servicios se han colapsado, siendo el caso más grave el de Chimalhuacán, en donde la falta de oficio en el manejo de la red de agua potable provocó el estallamiento del tanque de agua potable de la colonia Tepenepantla, provocando 8 lesionados, la afectación a una decena de casas y el desabasto en la zona (El Universal, 25 de noviembre de 2023).
El problema de la inseguridad, que algo se había abatido con los gobiernos anteriores, tanto en Chimalhuacán como Ixtapaluca que ya no aparecían en los primeros lugares de inseguridad. El primero ocupa el octavo lugar más inseguro (El Financiero, 19 de enero de 2024) de todos los municipios del país, en tanto que Ixtapaluca ocupa el sexto lugar, en índices delictivos (evolución, 9 de noviembre de 2022)
Con todo y estos resultados, con todo y la protesta ciudadana por los malos resultados, con todo y la inconformidad de los correligionarios morenistas, los candidatos de Morena… ganaron el pasado 2 de junio, por lo que tanto en Chimalhuacán como en Ixtapaluca, van a repetir los morenistas Xóchitl Flores y Felipe Arviizu, seguramente serán tres años más de lo mismo. Dice el dicho popular: “dinero mata carita, pero también mata no trabajo”
Atrás quedaron todos los testimonios de las irregularidades, documentadas la compra de votos, las amenazas implícitas de la pérdida de los apoyos de los programas sociales si no votabas por el candidato en cuestión, Sheinbaum decía en sus spots: “¿Quieres que sigan los apoyos?”, una evidente violación a la reglamentación electoral, la campaña desde la tribuna presidencial y el inicio anticipado, muy anticipado de la campaña de la ganadora presidencial, ocultada con el eufemismo de precampaña.
Ninguna protesta prosperó, una semejanza de las que se presentaron, lo mismo en las campañas, tanto estatales como municipales. Por eso, al inicio de este documento escribía que pareciera hasta un despropósito tratar el tema, pero no es así, tenemos la obligación de decirlo para que conste en autos, como dicen los abogados, y se proceda, con el tiempo, conforme a los superiores intereses nacionales, a favor de un mundo mejor. Al tiempo.
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