Un acontecimiento más de la política en Sonora viene a confirmar que los ediles morenistas o son muy incapaces para la administración o están profundamente corrompidos y debe intervenir otra instancia de gobierno, o alguien más, para poner fin a esta otra pandemia que corroe las entrañas del poder público.Se trata ahora de las denuncias que hizo el Instituto Superior de la Auditoría y Fiscalización (ISAF), de Sonora, de siete de sus municipios más poblados, dadas a conocer hace apenas unos días.Este asunto adquiere importancia porque cuando los ciudadanos comunes, organizados o no, acuden a los ayuntamientos denunciados, de manera regular obtienen la respuesta de que no hay recursos, "no hay, no hay y no hay dinero", contestan a quienes piden resolver los problemas del pueblo, y agregan: "hágale como quiera", o incluso "tráeme tú el dinero, gestiónalo tú y yo te lo administro", como cínicamente dijo el edil de Etchojoa.Y resulta que no pueden dar cuentas claras del dinero que sí reciben —porque sí lo reciben y, por tanto, sí hay—, sus cuentas, pues, no tienen ni pies ni cabeza, según se concluye del análisis del ISAF.Entonces, ¿Qué hacemos? ¿Era que no querían gastar nada en el pueblo porque traían un despapaye en sus cuentas o porque el relajamiento en lo financiero encubre perfectamente los desvíos? ¿Es injusto que pensemos así?
En el primer año de su trabajo, 2019, del cual se presenta el informe de la entidad fiscalizadora, los gobiernos morenistas municipales que dirigen los destinos de la mayoría de los sonorenses, presentaron malas cuentas, como veremos en detalle líneas abajo.Excepto algunos, en los municipios más poblados de esta entidad, sus ediles salieron "reprobados", dice la prensa, con un eufemismo aceptable para todos.Con más autenticidad deberíamos decir que presentaron un auténtico desmadre en sus cuentas.¿Qué pasó? El pueblo votó para que hubiera limpieza en el manejo de los dineros públicos y los datos de estos municipios morenistas muestran que fue un fracaso rotundo.Sin excepción, todos los gobiernos morenistas se comprometieron cuando eran candidatos a garantizar "la responsabilidad, precisión y eficacia para organizar y dar forma a las aspiraciones de una sociedad tan dinámica y efervescente como la nuestra", prometieron planes municipales de desarrollo que nos llevarían sin paradas directo a la felicidad y, desde luego, ofrecieron renovar la sociedad caduca y agotada, se presentaron como "la esperanza", ofrecieron darle dirección y orden a la administración pública, responsabilidad y la honestidad para orientar el recurso público a cambio de que la gente votara por ellos.Y a las primeras de cambio…
Los que así pidieron el voto en 2018 y ganaron, salieron peor incluso que aquéllos a los que derrotaron electoralmente.Dirá usted que es prematuro juzgarlos, que hay que esperar a que se defiendan, pero los señalamientos del ISAF son tan abrumadores —y aunque quizá algo justifiquen los morenistas—, que lo que ya le presentaron habla por sí solo, está tan mal que suena casi imposible que puedan corregir en un mes lo que hicieron reiteradamente mal durante un año.No hay pierde: lo que mal empieza, mal acaba.Tienen de plazo hasta el 10 de noviembre y sólo un milagro o un indigno enjuague político favorable los puede salvar.Habría que decir a estos morenistas: si no quieren que les tiren para qué se ponen de a pechito; pero les vale: su prepotencia es natural.
De acuerdo a las notas periodísticas, según el análisis de las Cuentas Públicas del 2019 por el mencionado ISAF, de los siete municipios más poblados en Sonora, cuatro aprobaron de 'panzazo' y tres están "reprobados" en el manejo del presupuesto, que son Navojoa, Caborca y Empalme (los tres gobernados por Morena), "que obtuvo un vergonzoso 3.8 de calificación, con 91 observaciones y 7.2 millones de pesos como posible daño patrimonial".Quienes apenas aprobaron son Nogales con 6.5 de calificación, Guaymas, con 6.6 y Cajeme con 6.9; después Agua Prieta con 7.3, todos gobernados por Morena.
La nota del diario Expreso, del 18 de septiembre pasado, dice también: "Además de Empalme, otros ayuntamientos con cuentas por aclarar son Navojoa que presenta 106 observaciones por un monto observado con posible daño patrimonial de nueve millones 499 mil 397 pesos, además de un monto observado por aclarar de mil 667 millones 257 mil 149 pesos, mucho dinero, considerando que el Presupuesto de Egresos de la administración municipal para 2019 aprobado por el Cabildo fue de apenas 692 millones de pesos (¡la multiplicación de los panes le quedó chiquita a Navojoa!, comentario mío, LMLA).Y Caborca que, con 66 observaciones, tiene un monto observado con posible daño patrimonial de 7 millones 369 mil 452 pesos y un monto observado por aclarar de 128 millones 111 mil 165 pesos".
Concluye el diario que, en total, entre estos siete municipios donde habitan la gran mayoría de los sonorenses, acumulan 594 de las 2 mil 980 observaciones que realizó al ISAF a las cuentas públicas de los 72 ayuntamientos.No dudo que también en otros partidos también se cuezan habas, pero aquí se trata de la mayoría de la población, que es también donde más se notó el voto por quienes prometían un cambio esperanzador.
Y mire usted qué casualidad.En varios de estos municipios fue donde más mal trato hubo a las comisiones antorchistas que solicitaban ayudas y apoyos para el pueblo más desamparado y donde menos ayudas hubo en esta pandemia para los que padecieron y aún sufren hambre.En las páginas y portales de Antorcha en Sonora verá usted cómo hemos denunciado muchas veces las informalidades, los incumplimientos de promesas, las maniobras y hasta los groseros argumentos y numerosos desplantes para no recibir en esos ayuntamientos a las comisiones de nuestros compañeros.Le rogamos que dedique usted un poco de su tiempo a verificarlo en nuestras páginas.Se lo pedimos porque son cosas que no se pueden pasar por desapercibidas ni menospreciarse: el pueblo no debe olvidar sus afrentas.Son pruebas igual de válidas que las del ISAF, sólo que provienen de los más humildes rincones de la patria sonorense.Cheque usted las veces que nos trataron con humillantes desplantes en Empalme, en Caborca, en Guaymas, etcétera… y ahora los vemos con tamaña desvergüenza.
Y pregunto: y a estos posibles defraudadores profesionales del pueblo ¿no los va a investigar la Unidad de Inteligencia Financiera? Ya sabemos que esta institución de la Hacienda Pública procede con base en los reportes que le envían los bancos acerca de movimientos presuntamente ilícitos, pero ¿y qué acaso los dineros faltantes en los municipios mencionados tienen pies y caminan solos, sin necesidad de tarjetas bancarias? ¿O será que sólo los investigará y les congelará cuentas bancarias a esos gobernantes hasta que critiquen al gobierno de AMLO? ¡Urge que los ayuntamientos cuestionados nos den cuentas claras!
Quede registrado por el pueblo de Sonora este acontecimiento y no se le olvide, tiene prohibido olvidar las burlas y crueles engaños y las disparidades tan humillantes con que es tratado.Hoy, la injusta Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), a cargo del represor Santiago Nieto Castillo, persigue con saña a los luchadores sociales de siempre, los acusa sin pruebas ni juicio previo ante los medios de comunicación para desacreditarlos y justificar más agresiones, justo como lo hace con nosotros, los antorchistas, y con los agricultores de Chihuahua que defienden su agua en la presa La Boquilla, con los periodistas que se atreven a disentir del presidente y de la 4T, con las mujeres ofendidas y agredidas, con los científicos, escritores y poetas que exigen que este maltrato y violaciones a nuestro Estado de Derecho deben parar, con los médicos y enfermeras que exigen insumos y a cambio son cruelmente burlados y acusados de alborotadores, igual que los padres de familia de niños con cáncer, etcétera.Pero ningún ayuntamiento morenista teme a la UIF, ni el propio presidente de la República, que no da cuenta de 560 mil millones de pesos que supuestamente ahorró luchando contra la corrupción y que nadie sabe dónde están, mientras los ayuntamientos de su partido hacen un descuartizadero de sus presupuestos.Al principio de este artículo decía que "alguien más" debía poner remedio a este mal: es el pueblo organizado: En cuestión de un año podremos cambiar la balanza a favor de garantizar una convivencia más civilizada entre los mexicanos y empezar a recuperar el espíritu de nuestras leyes y las leyes mismas.Entretanto, ¡Urge detener las agresiones y las persecuciones mediáticas instrumentadas por la UIF! ¡Urge una aplicación sensata de nuestras leyes! Y sólo el pueblo unido, disciplinadamente organizado y consciente podrá exigirlo con éxito antes de la siguiente elección.¡Urge que todos los damnificados por la 4T nos unamos, pronto!
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