Ya han comenzado las campañas presidenciales, algunas de carácter local, como las presidencias municipales y las diputaciones locales, iniciarán al término de este mes. Las encuestas indican que, en nuestro país, será la primera vez que una mujer llegue a la presidencia de la república. Las probabilidades, de acuerdo con las encuestas realizadas por varios organismos dedicados a este tema, lo confirman; este año, una mujer estará al frente de los destinos de nuestro país.
A la par de los presidenciables, también han iniciado los candidatos a diputados federales, quienes ya están haciendo campaña en los municipios que les corresponden según su distrito.
El pueblo debe exigir mejores propuestas para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos. Las carencias y dificultades que todos enfrentamos no se resuelven con discursos huecos.
En la actualidad, las redes sociales juegan un papel importante en la difusión de diversos temas, y la lucha por el poder no es una excepción en este medio. Ahora es más fácil escuchar los diversos discursos dirigidos a ciertos sectores de la población.
He escuchado varios discursos y muchos de ellos carecen de propuestas encaminadas a solucionar las necesidades de la población. Algunas frases como “vamos a quitar a la vieja política”, “ahora nuestro distrito o región lo vamos a pintar de tal color”, “vamos a mejorar las condiciones para todos”, “ahora sí llegó el cambio”. No hay propuestas concretas en temas como vivienda, empleo, seguridad, calles pavimentadas, entre otros. Nada de eso hemos escuchado al inicio de estas campañas; algunas propuestas simplemente consisten en continuar con lo mismo que no ha dado resultados al pueblo, mientras que la contraparte propone quitar a quienes están en el poder. Estas son sus principales banderas de lucha por el poder, una serie de propuestas generales que en el fondo les beneficiarán a ellos.
Por tanto, el pueblo debe exigir mejores propuestas para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos. Las carencias y dificultades que todos enfrentamos no se resuelven con discursos huecos, carentes de propuestas verdaderamente para el pueblo. Cada tres o seis años, nos presentan una variedad de candidatos por los cuales debemos votar, pero aunque las leyes de nuestro país permiten que cualquier ciudadano mexicano mayor de edad y en plena facultad de sus capacidades pueda participar para contender por un puesto de elección popular, en la realidad las cosas no son tan simples. Se nos imponen candidatos, como cuando alguien va a un buffet de comida en un restaurante y solo puede elegir entre lo que ya está expuesto.
Para tener candidatos que verdaderamente propongan soluciones a los problemas de las mayorías, que somos la clase trabajadora, debe ser un candidato surgido de la clase trabajadora, alguien que trabaje todos los días con mucho esfuerzo para llevar el pan a la mesa de su familia.
Necesitamos un partido de la clase trabajadora que defienda las luchas de los pueblos, se necesita la organización de las mayorías en beneficio propio. El pueblo tiene que levantarse, organizarse y luchar por mejores condiciones para sus familias.
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