A más de un año de haberse presentado el primer caso positivo de covid-19 en Sinaloa, siguen apareciendo grandes cantidades de contagios.
Aunque la Secretaría de Salud del estado de Sinaloa afirma que ya estamos en semáforo amarillo, el día de ayer reportó 547nuevos contagios, actualmente hay 1,788 casos activos, de los cuales 535 son del municipio de Ahome.
284 de Guasave, 436 de Culiacán, 62 de El Fuerte y Mazatlán 134, solo por mencionar algunos. Este panorama aún pinta muy mal.
Por lo que preocupan dos asuntos. Primero que el Secretario de Educación Pública del estado, Alfonso Mejía comentó el día de ayer que son poco más de mil escuelas con la que se emprenderá el programa de regreso presencial a las aulas, con capacidades de aforo que serán determinadas por los niveles de riesgo que vaya mostrando el semáforo covid.
Indicó que conforme a los criterios que se tienen para este fin en Sinaloa, con un semáforo en rojo podrán asistir solamente hasta el 30 por ciento de los alumnos, si es naranja, entre el 30 y hasta un 50 por ciento; si es amarillo, entre 50 y hasta 75 por ciento, y se es verde hasta la totalidad que sería hasta el 100 por ciento.
Con el alto número de contagios que se siguen presentando, ¿realmente estamos listos ahora sí para el regreso a clases presenciales?
Segundo. Mucho se ha insistido por todos los medios existentes que, para disminuir dichas cifras, es necesario que las familias "se queden en casa", y que frecuentemente se laven las manos. Pero la realidad que siempre está presente w y no deja mentir, nos dice que en Sinaloa existen familias que se han quedado sin empleo, y que siguen sin agua potable o agua entubada en sus domicilios por lo que estás medidas de la Secretaría de Salud no son posibles en las comunidades de Cahuinahua, La Misión Nueva, Las Chunas, Jahuara Segundo, Joaquín Amaro, y Cerrillos del municipio de El Fuerte, y en las colonias Ferrusquilla, Renato Vega y San Francisco del municipio de Ahome.
Estás dos situaciones preocupantes deberían ser prioridad para quienes nos gobiernan actualmente y para los gobernantes entrantes, dado que son un problema social que afecta a miles de familias humildes. Urge que se implemente un programa alimenticio en todos los rincones donde existan familias humildes y se inviertan recursos para que la mayoría de la población pueda disfrutar del agua potable, agua de calidad. Entrarle a estos problemas son un verdadero reto para quienes se dicen amigos del pueblo.
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