Twitter es una de las redes sociales más importantes e influyentes a nivel mundial, a pesar de que no es la que tiene la mayor cantidad de usuarios. Presenta ciertas particularidades que la hacen resaltar con respecto al resto de redes sociales.
Por su formato breve, permite estar al día de los acontecimientos más importantes de la realidad casi en el momento en el que ocurren. A través de las “tendencias” o “trending topic” la red social agrupa los temas más mencionados por los usuarios, a nivel mundial, nacional o incluso por regiones, eso facilita informarse de los asuntos que son más comentados por las personas, noticieros y personalidades importantes durante el día, pues las tendencias van variando. Es la red social con la información más actualizada e instantánea.
Asimismo, es una de las plataformas preferidas por las empresas, por los políticos, las personalidades importantes y los medios de comunicación, por lo que tiene mucha influencia en la opinión pública. En México actualmente hay alrededor de 13.9 millones de usuarios de Twitter.
Por eso se ha generado tanto ruido con la compra de Twitter por parte del hombre más rico del mundo, de origen sudafricano y nacionalizado estadounidense, Elon Musk, compra realizada por la módica cantidad de 44 mil millones de dólares.
La compañía fue fundada por Jack Dorsey, y otras cuatro personalidades, el 21 de marzo de 2006, con sede en San Francisco, California. En abril de 2007 se convirtió en un corporativo y Dorsey se convirtió en su primer director ejecutivo, cargo que ocupó hasta noviembre de 2021.
En esos años, Jack Dorsey vivió momentos de mucha presión, sobre todo en relación con el presidente estadounidense Donald Trump y su conflictiva forma de utilizar la red social, la relación de Trump con Twitter fue tan tóxica que el 8 de enero de 2021 la compañía suspendió de forma permanente su cuenta en la red social, después de la insurrección en el Capitolio. El 4 de abril de 2022, Elon Musk compró el 9.2 por ciento de las acciones de Twitter lo que lo convirtió en el mayor accionista individual de la empresa, el 25 de abril de 2022 Twitter aceptó la oferta de compra de Elon Musk.
El pasado 27 de octubre, se cerró el acuerdo con el que se eliminó una nube de incertidumbre que se generó sobre el negocio con los accionistas de Twitter durante gran parte del año. Después de aceptar inicialmente comprar la compañía en abril, Musk pasó meses intentando romper el trato, citando preocupaciones sobre la cantidad de bots en la plataforma. Tan pronto tomó el control de Twitter, el hombre más rico del mundo despidió con efecto inmediato y por la fuerza al director ejecutivo de la compañía, al director financiero y al jefe de políticas y asuntos legales, acusándolos de haberlo engañado a él y a los inversores de Twitter sobre la cantidad de cuentas falsas en la plataforma de la red.
Según un artículo de The Washington Post, Musk informó que esperaba, a largo plazo, despedir al 75 por ciento de los 7.500 empleados de Twitter. Según cifras internas de la compañía, más de 700 empleados ya han dejado el grupo californiano desde junio. La plataforma Twitter será eliminada de la lista de las compañías que cotizan en la Bolsa de Nueva York (NYSE), por tanto, pondrá fin a la cotización de los títulos de valor de la empresa en los mercados públicos, por lo que se disolverá la junta administrativa de la plataforma y se formará un consejo de administración con los allegados al nuevo dueño. Con esto, la red social en parte, dejará de estar sometida a tanto escrutinio público, puesto que no se le exigirá hacer informes trimestrales públicos sobre el transcurso de los negocios, señalan desde el NYT.
Para lograr financiar la operación de Twitter, Musk buscó créditos y nuevos socios, entre los cuales se encuentra el multimillonario príncipe saudí Al Waleed bin Talal quien se convirtió en el segundo mayor accionista del nuevo Twitter. “Querido amigo “Jefe Twit”, Elon Musk, juntos en todo el camino”, dijo Al Waleed ayer en su cuenta de Twitter, después de que el propio Musk anunciara la transacción.
Según Musk, “la razón por la que adquirí Twitter es porque es importante para el futuro de la civilización tener una plaza digital común, donde una amplia gama de creencias puedan ser debatidas de una manera saludable, sin recurrir a la violencia”. También aseveró que quiere permitir las expresiones de todas las opiniones en la red social, sin hacer de ella una plataforma “infernal sin límites, donde se pueda decir cualquier cosa sin consecuencias”. Promete también acabar con las prohibiciones permanentes de las cuentas de los usuarios, lo que podría allanar el camino para la restitución de los perfiles suspendidos de algunos personajes de la política.
El cambio de manos de Twitter ha generado inquietud y reacciones en varios frentes. Varias organizaciones civiles, incluida la poderosa Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, según sus siglas en inglés), han hecho hincapié en el peligro de que una sola persona tenga tanto poder en sus manos al controlar una de las redes sociales más influyentes del planeta, una inquietud que se extiende también a Mark Zuckerberg, dueño de Meta. Por su parte Thierry Bretón, Comisario de Mercado Interior de la Comisión Europea, advirtió que Twitter tendrá que someterse a las normas de moderación de la Unión Europea
Elon Musk se ha presentado ante el mundo como el adalid de la libertad de expresión pero en realidad tiene ambiciosos planes económicos, pues según reveló el diario The New York Times se propone quintuplicar las ganancias anuales de Twitter hasta los 26 mil 400 millones para 2028, en comparación con los cinco mil millones, en 2021, pues ha amasado su fortuna a través de la empresa Tesla, fabricante de autos eléctricos y tecnología de punta, así como iniciativa aeroespacial SpaceX, para poner en marcha satélites en el espacio ultraterrestre y viajes turísticos al espacio exterior. Musk se propone que el número total de usuarios debe crecer hasta los 931 millones en 2028. En la presentación se mencionó también un proyecto apodado como "X" que tendría 104 millones de usuarios. Es decir, lo que busca es incrementar sus ganancias para hacerse más rico aún y adquirir mayor control sobre la población mundial.
A pesar de todo lo dicho, los movimientos revolucionarios de México y del mundo deben aprender a utilizar esta red en beneficio de sus agremiados: crear cuentas de Twitter, utilizarlas permanentemente para que no las cierren, aprender a transmitir mensajes importantes con pocas palabras, hacer denuncias de los problemas y necesidades que hay en los pueblos y colonias, denunciar las arbitrariedades de los funcionarios, difundir la cultura de nuestros pueblos y los valores humanos como la tolerancia, la bondad, la solidaridad, la justicia, la responsabilidad, la honestidad, entre otros. Utilizar esta red como un arma de lucha de las clases trabajadoras mientras les sea posible.
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