Desde que inicio del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador fue muy notable la constante crítica de los medios de comunicación y de periodistas destacados, nacional e internacionalmente, debido a su forma de actuar ante los problemas sociales y económicos por los que ha pasado el país, ya que, en repetidas ocasiones maneja datos que en todo momento van en contra de la realidad que todos podemos ver, ocasionando confusión e incredulidad ante la población mexicana.
La realidad que se vive en el país refleja, desde siempre, la verdad ante los sucesos nacionales que enfrentamos con el pasar del tiempo. Y, aunque el presidente con su gobierno trate de tapar los datos reales y sus consecuencias, la realidad siempre nos demuestra todo lo contrario. En esta ocasión, quiero enfocar mi opinión al reciente informe de los primeros cien días del tercer año de gobierno del presidente, ya que, me sigue pareciendo que el discurso que se maneja ahí es bastante engañoso, pues nos muestra un panorama alentador que contradice a la realidad.
El día miércoles 31 de marzo pasado salió en los medios digitales de noticias, un resumen detallado sobre el informe que dio el presidente en cuanto a la gestión que ha realizado en lo que va de su gobierno. A continuación, detallaré aquí algunos datos referentes a este tema.
En primer lugar, se dice que el presidente habló sobre la fuerte inversión en obra pública que su gobierno está realizando. Sin especificar concretamente en donde se está aplicando dicha inversión, yo me atrevo a decir que esas obras pudieran ser el ya muy conocido Tren Maya, la refinería de Dos Bocas y el aeropuerto de Santa Lucía. Fuera de estas obras y de la “construcción” de las supuestas universidades “Benito Juárez”, yo no conozco otra obra alguna que el Gobierno federal esté promoviendo para el beneficio de la población, sino que, por el contrario, mucha obra pública se dejó de hacer desde la llegada del presidente al poder.
En datos de la Secretaría de Hacienda se dice que “los recursos para construcción de obras cayeron 25 por ciento anual, es decir, 40 mil 136 millones de pesos, el peor monto desde 2011”. Esto significa que en el año 2020 se invirtió menos en la creación de obra pública.
Más adelante, el presidente en su informe aseguró que en cuanto a los programas sociales que su gobierno está implementando, éstos están llegando en su mayoría a todos los hogares mexicanos, pero, los datos nuevamente nos dicen que esto es todo lo contrario, veamos.
Según datos del Censo de Población y Vivienda 2020 realizado por el Inegi, se dice que uno de cada 4 hogares en el país recibe algún ingreso por parte de los programas sociales, esto es un 25% de hogares, dejando sin apoyos sociales al 75% de los mismos, lo que significa que la estrategia del Presidente de dotar de becas de todo tipo a toda la población, resulta ser un engaño más.
Por otro lado el presidente dijo que en cuanto al tema económico, él espera que se estabilice la economía en todo el país a mediados del año 2021, dato muy alentador, pero, no podemos olvidar que en el año 2020 el país sufrió un colapso del 8.5% en términos económicos, y que para este año se prevé que la recuperación sea del 4.5%, de acuerdo con el análisis que presenta la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), por lo tanto, no podemos pensar en que el país presente una estabilización económica, tal como se dice, además, de que dicho planteamiento se da sobre todo, conforme al alto ingreso de remesas que han llegado al país, que, si bien es cierto, que es un buen detonante para la economía mexicana, demuestra que el gobierno federal no está haciendo lo necesario para una estabilización económica con recursos propios. He aquí la realidad en contra de la palabra del Presidente.
Está claro que la situación en el país ya se encontraba muy mal desde antes de la llegada de la 4T al poder de la nación, pero, por lo visto, también podemos imaginarnos que este gobierno no va a cambiar dicha situación, no porque no pueda, o porque no sepan cómo hacerlo, sino porque no son verdaderos gobiernos emanados del pueblo al servicio del pueblo.
Ante este panorama tan desolador, la solución a los problemas de fondo de toda la sociedad, se encuentra promoviendo un cambio de sistema económico por uno más justo y equitativo para todos. Hoy en día, se hace más necesario que el pueblo salga a dar la cara en contra de los gobiernos, y que sea el mismo pueblo quien gobierne en favor de toda la población. Y aunque haya quienes digan que el gobierno no es para el pueblo, porque el pueblo no sabe gobernar, yo digo que eso es mentira, ya que el pueblo sabe muy bien cuáles son las necesidades de toda la población, por lo tanto, luchará por mejorar las condiciones de todos. Al tiempo. (Sígueme a través de mi cuenta oficial de Twitter como @RamsesGalindo3 para más información, estoy a sus órdenes).
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