El deporte en México ha experimentado muchos cambios a lo largo del tiempo. En la época prehispánica, los pueblos indígenas lo practicaban como parte de sus rituales religiosos y no existía un intercambio económico en torno a ellos. Después de la conquista, fueron prohibidos por la iglesia católica, por ejemplo, el juego de pelota.
En el siglo XX, el deporte comenzó a ser visto como una fuente potencial de ingresos económicos y se desarrolló una industria deportiva en México y los deportes occidentales, como el fútbol, el boxeo y el béisbol, comenzaron a ser introducidos en el país. Los eventos deportivos importantes empezaron a ser utilizados como plataformas para promover el turismo y atraer inversiones al país, esto convino económicamente a las empresas y dueños de clubes deportivos, ya que sus ganancias se vieron jugosamente acrecentadas.
Históricamente, el deporte mexicano ha estado prácticamente en el abandono por parte del gobierno, sea quien sea que lo represente, llámese PRI, PAN, Morena, no se le ha invertido con justeza a los programas que ayuden y motiven a los deportistas a continuar con sus aspiraciones representar dignamente a México en competencias de carácter mundial. La falta de presupuesto suficiente para la infraestructura deportiva, capacitación, formación y promoción del deporte en la sociedad, son retos y desafíos que en la actualidad están muy lejos de ser comparados con potencias europeas en el ámbito de competencia y calidad deportiva.
México esté en el total abandono en materia presupuestal y tecnológica en cuánto al deporte se refiere, no se invierte y, en consecuencia, los resultados son malos en comparación con deportistas de otros países. Si hubiera recursos suficientes y apoyo por parte del gobierno, los resultados en nuestros deportistas se generarían de manera casi automática, pues contamos con buena cantidad y calidad de jóvenes que realizan estas actividades, pero sin el apoyo del gobierno, seguirán jugando en canchas improvisadas, con entrenadores aficionados y no profesionales, las nuevas juventudes no se interesarán en el deporte y serán carne fresca para los grupos delictivos que los cooptan a sus filas para hacerlos delincuentes.
En la vida de los mexicanos, el deporte debe considerarse como una política pública que tiene que ser aplicada de manera permanente y con la suficiente cobertura para poder establecer oportunidades y espacios en beneficio de todos los que quieran ejercitarse. Esta implementación sería un refuerzo en la estrategia para la prevención de enfermedades como el sobrepeso y la diabetes, que han cobrado miles de vidas en México.
El Movimiento Antorchista Nacional, preocupado por esta grave situación, ha trabajado en fomentar el deporte con un enfoque verdaderamente social y no de carácter económico, prueba de ello es que cada dos años organiza una justa deportiva denominada Espartaqueada Deportiva, que este año será de manera presencial, del 6 al 14 de mayo, en el municipio de Tecomatlán, en el estado de Puebla.
Este evento busca, en primer lugar, hermanar a los mexicanos que a través del deporte se han destacado en cualquiera de sus disciplinas, sea basquetbol, futbol, vóleibol, natación, atletismo, etc. y, en segundo lugar, busca fomentar la competencia sana sin fines de lucro con la firme claridad de hacer más sensibles a los hombres y mujeres que gustan del deporte y así contribuir en la creación de una conciencia más crítica y sensible ante los problemas que aquejan a nuestra sociedad.
Para asistir a ese evento nacional, se han presentado solicitudes de apoyo al gobierno municipal y estatal de Tlaxcala, pero lamentablemente no hemos recibido respuestas positivas ante las solicitudes que hemos hecho llegar a las diferentes instancias de gobierno. Este es el caso de la delegación de más de 300 jóvenes deportistas que representarán a la entidad que han entregado las solicitudes en las instancias requeridas y la respuesta es la misma: “no tenemos presupuesto para apoyar”.
Es reprobable que el gobierno que encabeza López Obrador salga a decir a pulmón abierto que hay apoyo al deporte y que en la realidad se de carpetazo a las solicitudes planteadas. ¿Qué piden los deportistas? Que se les brinde material deportivo, transporte y uniformes, eso es lo que solicitan, no es otra cosa. La política aplicada no está en servicio y atención de las necesidades del pueblo, cada día que pasa se le escapan de las manos las riendas del país. Es responsabilidad del gobierno invertir, promover, garantizar y brindar acceso universal ya que el deporte no solo es bienestar físico y mental, sino que es una herramienta poderosa que fomenta la unidad.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario