Supieron como enamorar el oído de los veracruzanos, y es que era fácil caer después de tanto desprestigio de los gobiernos anteriores, donde se robaba, engañaba y traicionaba al pueblo sin temor alguno, supieron llegar a tiempo y en el preciso momento donde la gente buscaba nuevas alternativas, buscaba otra salida a los malos gobiernos de nuestro estado y país. Tuvieron un candidato a la presidencia, que se pasó doce años en una campaña sin fin, demostrando en medios de comunicación que era el “líder social” que necesitaba México, que era el mesías, guiador del pueblo pobre hacia un futuro prometedor. Supieron ofrecer su propaganda política y justamente ahí tuvieron la oportunidad muchas personas para colgarse de la fama para llegar al poder en diferentes estados.

Nuestro estado no fue la excepción, con la llegada de Morena a Veracruz, después de haber visto como administraciones pasadas robaron a manos llenas, la población empezó a ver como buena opción a dicho partido y sus candidatos, arrasando en las urnas de todo el estado. Pero ya no podemos seguir viviendo en el pasado, debemos ver la realidad aunque a muchos les duela, la triste realidad de nuestro estado continúa igual o incluso peor que otros gobiernos, los mismo resultados de Cuitláhuac en materia de seguridad, apoyo a la población, la educación, la economía nos muestra que todo lo que decían y prometían en campaña, se quedo ahí, en puras palabras que se llevó el viento y como siempre, el pueblo es el que sale perjudicado al final de cuentas.

Si nos vamos al rubro de la seguridad, nuestro estado arroja resultados que deberían preocupar a toda la población en general. Ya que Veracruz ocupa el primer lugar nacional en delitos de violencia de género con 529 denuncias de enero a junio del 2021, y es séptimo lugar en delitos de violencia familiar, con 4,899 denuncias en el mismo periodo. Las cifras para Veracruz se dispararon en un 50% con respecto al mismo periodo enero-junio del 2020, cuando se tenían 312 denuncias por violencia de género y 2,397 denuncias por violencia familiar.

Según las cifras del Secretariado Ejecutivo Nacional del Sistema de Seguridad Pública sobre la información sobre violencia contra las mujeres del 25 de julio, señala que, en violencia de género, Veracruz tiene una incidencia de 6.19 por cada 100 mil habitantes, superior a la media nacional que es de 1.41. En violencia familiar, la entidad registra una incidencia de 57.4 por cada 100 mil habitantes, por debajo de la media nacional que es de 81.6

En cuanto a las llamadas al 911, Veracruz sumó 1,982 llamadas de emergencia por violencia, 58 llamadas relacionadas con incidentes de abuso sexual, 224 relacionadas con hostigamiento sexual, 62 con violación, 2,752 llamadas por incidentes de violencia de parejas y 19,802 llamadas por violencia familiar, nuestro estado se encuentra en los primeros lugares de feminicidio, secuestro y extorsión.

Ahora bien, si nos vamos a la educación, nuevamente presentamos graves problemas, desde poca ayuda a la infraestructura de escuelas en los diferentes municipios, hasta desvíos de recurso o malos planes para un regreso a clases seguro. Ya que nuestro estado se ha encontrado estancado desde administraciones pasadas en el avance de la infraestructura dejando a muchas escuelas en el abandono, las cuales no cuentan con aulas dignas e incluso sin los servicios básicos como agua o luz, haciendo que los docentes busquen alternativas sin el apoyo de la SEV, en donde el actual titular, Zenyazen Escobar, se le han detectado malos manejos de recurso, uso de las ya famosas empresas fantasma e incluso denuncias por parte de trabajadores por acoso hacia ellos. Ya que el actual secretario desde su llegada se ha envuelto en una serie de denuncias, donde se muestra su poca capacidad para resolver las demandas mas elementales de escuelas, casos ejemplo de su mal trabajo es la detección de constructoras fantasmas, ya que en un análisis de las 434 aulas y 218 espacios educativos que ha presumido la SEV como rehabilitadas hay contratos a tres empresas con domicilios en los que se preparan mole, se lavan automóviles o bien podrían haber sido bares clandestinos. 

Otro caso es el contrato IEEV-MOP-020-19 asignado a la empresa Constructora AKAB, S.A. de C.V. que debió iniciar el 2 de septiembre y concluir el 31 de octubre. La empresa con domicilio en Las Palmas No. 4 en la colonia Unidad Habitacional y Deportiva “El Castillo”, en Xalapa, estaba obligada a terminar una obra con un importe de 350 mil 960 pesos. El mismo domicilio de la empresa resulto ser una casa habitación que vende mole.

Sumando a esto el suceso del desalojo a maestros pertenecientes a un sindicato, los cuales se manifestaban afuera de la SEV ya que no estaban siendo tomados en cuenta en las reuniones que realizaba el secretario de educación, por lo cual, con la fuerza policial fueron retirados e incluso detuvieron a tres maestros, quienes se sentían inconformes y veían como su derecho a la manifestación era pisoteado. 

Y no solo existen estas pocas muestras, si nos metemos en cada ámbito, nos tardaríamos horas en ver que lo que dice el gobernador y sus funcionarios no cuadran con la realidad que vivimos los veracruzanos, y así como este, existen muchos casos, el poco apoyo a la economía de pequeñas empresas y trabajadores informales, la nula ayuda a los afectados del huracán Grace, el abandono del campo, donde los pequeños productores no cuentan con un apoyo y los pocos que llegan son entregados a unos cuentas, mientras el resto sigue a la espera de esa ya famosa “esperanza” o “4ta transformación”. Pero no, ya no podemos seguir esperando esa transformación ya no podemos seguir creyéndonos esa excusa de que con Morena habría esperanza para el pueblo, porque lastimosamente no será así. 

Ya pasaron tres años y pareciera que el estado no avanza, en lugar de salir adelante, retrocedemos y no podemos seguir así. Es justo que por el pueblo y para el pueblo llegue la hora de elegir mejor a nuestros gobernantes, si realmente queremos salir adelante debemos prepararnos y educarnos para no volver a caer en los mismos errores, la misma realidad nos demuestra que Morena no es la esperanza de Veracruz, nunca fue y nunca lo será, esa esperanza o transformación llegará cuando realmente coloquemos a una persona que haya salido de las masas populares, que sepa lo que es sufrir y luchar por llevar el pan día a día a una mesa, que sepa y sienta todo el sufrimiento del pobre, para que cuando llegue el poder no se olvide de quienes lo han puesto ahí y a quienes debe apoyar, y esa tarea debe ser de todos, es un compromiso que debemos adquirir con nuestro estado si realmente lo queremos sacar del agujero donde se encuentra. 

¡Por el bienestar y futuro de nuestro de nuestro estado, unamos fuerzas y luchemos para salir adelante!