Soy un estudiante de bajos recursos y en esta ocasión quiero compartir mi experiencia sobre la atención médica, ¿Qué de novedoso podría tener?, sin duda puede ser un ejemplo de lo que padecen miles de familias, sobre todo de aquellas que no tienen acceso a los servicios de salud. Una situación que se complica ante la puesta en marcha por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador el primero de enero de este año del Instituto de Salud del Bienestar (INSABI), en sustitución del Seguro Popular.
A finales del 2019 acudí al hospital general de San Pedro Coahuila, era media noche y necesitaba atención debido a una intensa tos. Me recibió una enfermera –por cierto, muy amable-, antes que nada, me preguntó ¿Usted cuenta con servicio médico?, mi respuesta fue que no, acto seguido me informó que la consulta tendría un costo de 200 pesos, en mis bolsillos apenas tenía unos cuantos pesos, por lo que le di las gracias y deje el hospital. Busqué una farmacia, compré unas tabletas de Tabcin –que para eso si me alcanzaba-, y con eso me receté la curación.
Mi experiencia me hace cuestionar ¿Cómo la atención médica por un malestar común tiene un costo elevado? Quizá 200 pesos o un poco más no represente mucho dinero para algunas personas, pero desde mi experiencia, sí que lo es, cuando la persona gana apenas lo básico, no tiene trabajo, es ambulante o tiene que destinar recursos para otra cosa, ahí 200 pesos son como una botella de agua en un desierto.
Por lo que cancelar el Seguro Popular, un programa que venía funcionando desde dos sexenios atrás, en mucho le ayudaba a la gente, pues no generaba un costo mayor para quien de verdad lo requería. Pero el presidente lo quitó sin medir las consecuencias y hoy vemos en los medios de comunicación la falta de atención médica, de medicinas y hasta de equipo médico. Hoy opera el Instituto de Salud del Bienestar (INSABI), y en los primeros días se ha exhibido como una improvisación por parte de la Cuarta Transformación, carece de reglas de operación, de recursos y de personal.
Es decir, la actual administración juega con la salud de los mexicanos. Parece que a las autoridades actuales no les queda claro que la salud es un derecho, lo marca la Constitución en su artículo 2°, apartado B, fracción III, donde a la letra dice lo siguiente: "Asegurar el acceso efectivo a los servicios de salud mediante la ampliación de la cobertura del sistema nacional, aprovechando debidamente la medicina tradicional". Una vez más la justificación por parte del presidente es que en el Seguro Popular había corrupción, no vemos denuncias penales, lo que sí hay es una crisis en el sector salud y que está afectando a muchos mexicanos. Por lo tanto, a la gente pobre le están dejando únicamente dos salidas: se atiende con el poco dinero que tiene para no moriste o come.
Es hora de plantearnos la solución, una que no está en un gobierno que dijo "primero los pobres", pero que ha está demostrado que su política es todo lo contrario. únicamente el pueblo organizado, educado y concientizado podrá cambiar la situación del país, de la mano de un gobierno surgido del pueblo, y eso es el Movimiento Antorchista, vamos con la organización.
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