Culminan las administraciones municipales 2018-2021 y en algunos municipios se destacan obras de gran impacto, gobernabilidad y en algunos casos alcaldes que lograron una reelección sin contratiempos, sin problemas, con un pueblo satisfecho, debido a los resultados de su gestión, gobernantes con cercanía a la gente, empáticos y con atención puntual.
Pero no en todos los municipios es él mismo panorama y un claro ejemplo de ello es Tepeyahualco, un municipio con más de 450 años de antigüedad y con un estancamiento y rezago en todos los sentidos. En el “Informe anual sobre la situación de pobreza y rezago social 2020”, elaborado por el Coneval, Tepeyahualco arroja datos preocupantes, la población en pobreza es de 62.1%, la población vulnerable por ingresos es de 24.8%, la carencia por acceso a la alimentación es de 26.9% mayor en dos puntos porcentuales a la media del estado de Puebla.
Es un municipio que no se ha desarrollado debido a la mala gestión de las administraciones que han pasado, ocasionadas debido al desinterés de los gobernantes, al no hacer su prioridad el desarrollo de Tepeyahualco. En el periodo citado, la población nuevamente ha sido burlada, nunca se cumplió el proyecto expuesto en campaña en 2018, las altas expectativas no fueron cumplidas y se quedaron en promesas.
Actualmente, Tepeyahualco se encuentra viviendo con miedo debido a que no se resolvió el tema de inseguridad, problema que por años ha sido un talón de Aquiles en el estado, la posición geográfica de Tepeyahualco es una franja estratégica para el crimen organizado, hoy sabemos que promesas de cámaras de seguridad, casetas de vigilancia vacías no son la solución. En los últimos días se ha complicado más, vivimos en un pueblo sin legalidad, sin intervención de ningún orden de gobierno, no es sorprendente vivir en la inseguridad a diario a todas horas.
Y no solo es el problema la inseguridad, en tres años no hubo inversión en infraestructura educativa sigue faltando la universidad que se presumía se lograría, existió en tres años una falta de escucha a la ciudadanía en todas las ventanillas de atención del municipio.
Percibimos obras de mala calidad, obras innecesarias, remiendos en calles que no son prioridad, obras que solo reflejan el pago a favores personales o familiares, una inversión y ejecución del techo financiero invertido sin el consenso de la población, los regidores simplemente títeres que solo sirvieron para firmar lo que la voluntad del presidente municipal les indica.
Las razones son muchas, se deben a la cultura y vicios que han alimentado personajes políticos que utilizan al electorado para llegar a dicho puesto y posteriormente olvidarse de los compromisos y proyecto de campaña.
Esta última administración es donde se dividió al pueblo con regalías, donde se condicionaron apoyos, en donde su mejor estrategia fue la calumnia y desinformación del pueblo; el resultado es que todos los habitantes se quedan con un Tepeyahualco donde no hay certeza de quien gobernara a nuestro municipio en los próximos meses, donde siempre hubo ausencias de las autoridades.
Hoy, amigas y amigos de Tepeyahualco, es tiempo de reflexión, es tiempo de decidir libres y de tener presente que Tepeyahualco nos necesita, hoy tenemos que hacer a un lado los intereses personales, las prioridades individuales, hoy tenemos que pensar en las próximas generaciones, ¿qué vamos a heredar?
Cada uno de nosotros es pieza fundamental y necesitamos trabajar arduamente y tener en cuenta que esta última administración traicionó en primer lugar a la gente que votó por ese proyecto y en segundo lugar a toda la gente que no tuvo alternativa.
Es necesario estar atentos a los tiempos que se aproximan para Tepeyahualco y sobre todo ser partícipes en cuidar y procurar que se fomente la paz, armonía y convivencia entre toda la población.
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