Aún recuerdo que en las elecciones federales de 2012 cuando los políticos se disputaron la presidencia de México, entre Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, y el priista salió victorioso, hice el comentario que me hubiera gustado que López Obrador ganará para que la gente que confía en él y en su cambio se dé cuenta que la política que él propone es errónea y que no puede sacar a la gente de la pobreza.
Pasó la administración de Peña Nieto, y sus errores dentro de su gobierno hicieron que la gente terminará odiando al PRIAN porque siempre es lo mismo con estos partidos, entonces el proyecto de AMLO con su propio partido, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y su slogan de la Cuarta Transformación, primero los pobres, logró que en 2018 por fin ganará con un total de más de 30 millones de votos, y con una participación histórica en la votación.
Esto fue una señal de que la gente está harta de la política mexicana que pide a gritos un verdadero cambio, y pensaron que con la famosa Cuarta transformación se lograría, pero no. En los 3 años que llevamos de su administración, las decisiones que ha tomado López Obrador han empeorado la situación de millones de familias, desde quitarle diferentes programas sociales como prospera, guarderías públicas, comedores comunitarios, seguro popular, becas para estudiante de educación básica, apoyos a los niños con enfermedad de cáncer, entre otros ha provocado que la opinión de que por fin las cosas iban a cambiar ha cambiado a que es lo mismo de siempre.
El problema del presidente de la república es que no tiene un plan para combatir realmente la situación del país, de cómo mejorar la economía de las familias, porque no se trata de solo darle el apoyo directo, porque eso, no elimina su pobreza, debe de resolver la falta de agua potable de millones de personas, debe de buscar como hacer que la electricidad llegue a todo el país, y no solo eso, debe decir como asegurarle todos los servicios básicos a los 123 millones de mexicanos que se encuentran en el país para que tengan una vida digna, no solo tiene que salir a decir que dentro de unos meses tendremos la vida como en otros países, tiene que decir cómo se va a resolver.
Y la gente ya se dio cuenta de que AMLO no va a resolver nada, por eso él va perdiendo su popularidad y da a relucir en las anteriores votaciones para la revocación de mandato en la que no tenía opositores, que tenía a todos los servidores públicos haciendo campaña a su favor, que todo el país tenía su imagen plasmada en bardas, espectaculares entre otras cosas, ha esto le aumentamos que tenían como mover a las personas para que salieran a votar, y, pues, al final de la jornada solo obtuvieron 15.7 millones de votos, la falta de resultados ha provocado este rechazo al gobierno de Morena.
Con todo esto mi comentario que realice, posiblemente sin sentido, de que ganara AMLO para que la gente se diera cuenta que él no era la solución, pues ahora es una realidad. La gente ya no confía en él, ahora el problema es quien seguirá gobernando porque ya se demostró que todos los partidos políticos no vienen del pueblo y no se van a preocupar por el pueblo.
Es por eso que urge que el mismo pueblo gobierne y que el mismo pueblo vigile que se gobierne bien, y la muestra está en que el Movimiento Antorchista que desde hace más de 40 años gobierna Tecomatlán, Puebla, y el cambio que ha tenido el municipio se ve reflejado en los municipios a su alrededor y ese mismo cambio puede llegar a todo el país solo es cuestión de que las personas se den cuenta.
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