La campaña política rumbo a la elección por las gubernaturas de Coahuila y el Estado de México, en este 2023, sin lugar a duda, representa un momento que marcará en muchas medidas la trascendencia política de 2024, año en el que la presidencia de la república tomará un nuevo rumbo o seguirá con la llamada Cuarta Transformación.
Por lo mientras, aún falta cerca de un año para empezar ese proceso; la realidad en Coahuila y el EdoMex se está llevando a cabo y el 04 de junio se sabrá qué sucederá en estos estados, que ambos tienen en común ser los últimos bastiones donde el Partido Revolucionario Institucional (PRI) nunca ha dejado de gobernar y que siempre ha logrado el éxito rotundo ¿lo será nuevamente?
Veamos, en Coahuila el gobierno emanado del actual gobernador Miguel Riquelme ha dejado en tema de seguridad, economía y social al estado en buen balance, tomando en cuenta que ha traído la seguridad para los y las coahuilenses desde que hace una década este estado norteño era catalogado como uno de los más peligrosos por la ola de violencia que ahí se vivía y, es precisamente esa la propuesta que tiene ahora el candidato por la coalición PRI, PAN y PRD, Manolo Jiménez un político y empresario de Saltillo, seguir llevando el legado de Miguel Riquelme.
Jiménez ha ocupado varios cargos públicos, entre los que resalta haber sido presidente municipal de Saltillo y posicionar a la capital como una de las mejores ciudades para vivir en México. De acuerdo con las encuestas de Reforma y El Universal, Manolo aventaja en las preferencias, pues mantiene más de 49 puntos a favor en comparación con su principal opositor Armando Guadiana, de Morena, que lleva 25 puntos de preferencia. Ricardo Mejía y Lenin Pérez dividen los 26 puntos restantes y por ello parece ser evidente el triunfo del PRI en Coahuila.
Al haber llevado una campaña durante dos meses con la que Manolo siempre fue ventajoso por la gran estructura de priistas que hay en Coahuila en contraparte del empresario minero que nunca logró despegar una campaña exitosa y con propuestas muy majarás y con una pelea notoria entre Ricardo Mejía que solo hizo o hará que los votos se dividan y finalmente con el que menos popularidad ha tenido y que estará a la espera de lograr solo los votos necesarios para mantener el registro de su partido local (UDC) así es como va la cosa acá por el norte.
Bajando hasta el centro del país, en el emblemático Estado de México, solo dos candidatas van en lucha por la contienda electoral para ver quien será la primera mujer en gobernar este estado que es fuertemente conocido por los grandes problemas de inseguridad, vivienda, desigualdad y corrupción que tiene desde hace muchos años, realmente es difícil para los y las mexiquenses ver por quién van a votar.
Alejandra del Moral y Delfina Gómez, nuevamente se enfrentan por un puesto público; en 2018 ambas fueron candidatas al Senado de la república; Ale perdió contra Delfina, y fue en 2021 cuando se convirtió en secretaria de Educación Pública sumandole ahí muchos actos en contra del pueblo como el que ya tenía arrastrando en su administración como presidenta municipal de Texcoco, le descontó 10 por ciento de su sueldo a 472 trabajadores y una parte de ese dinero fue para financiar a Morena.
Como secretaria de Educación también dejó mucho que desear como buena funcionaria, al desaparecer las escuelas de tiempo completo y el que la cifra de 830.7 millones aún no se sabe el destino de ese dinero según un informe de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Por la otra parte, Ale del Moral, la candidata valiente de 39 años, ha sido diputada federal, alcaldesa del municipio de Cuautitlán Izcalli y dirigente del PRI en la entidad, y antes de subirse al tren de la campaña fungía como secretaria de Desarrollo Social del EdoMex, relativamente una mujer sin mucha cola que le pisen, pero sí que tiene en su espalda todo un partido que ha gobernado el estado y que carga con todos los problemas, además de su supuesta pertenencia al denominado Grupo Atlacomulco, definitivamente es cerrada la competencia, Delfina lleva la delantera por cerca de 60 puntos en contra de Ale, con 42; al final las encuestas son solo eso, mecanismos de estadísticas que no pueden ser el resultado final, pues ese lo dan el domingo 04 de junio los y las votantes.
La punta de lanza o el parteaguas para lo que se vivirá en 2024 es lo que estas elecciones nos enseñarán, recordemos que el Estado de México, al ser la entidad más poblada del país, es el estado más importante en términos de votos (13 por ciento del total) del padrón para una elección federal, como lo será la de 2024, en la que no solo se decidirá la presidencia de la república, sino también la composición de las dos cámaras del Congreso de la Unión y que, además, no permitirá saber si los partidos como PRI y PAN que durante mucho tiempo fueron oposiciones fuertes, seguirán con las alianzas para hacerle frente al monstruoso fenómeno manipulador de Morena que ya tiene no solo a uno sino a tres posibles candidatos a la contienda electoral, mientras que por la oposición no se ve ningún personaje fuerte que abandere el opositor de Morena en 2024 y por ello la pregunta final es ¿realmente existe oposición en México actualmente?
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