Son las 7:30 de la mañana de un lunes y los jóvenes entran a tomar clases en el Bachillerato Digital Número #283, ubicado en Amozoc. Son las 8:00 am y están por entrar los últimos alumnos de los 212.
En el bachillerato, los jóvenes de primero toman clases en los pasillos de la parte del afuera del único salón que hay y los de segundo y tercero adentro (donde no hay una pared que los divida).
“La instalación en la que están los jóvenes no es la adecuada para dar y recibir clases”, dice Adrián Cortés, director de la institución. Cuando los alumnos van al baño tienen que ir acompañados, ya que no hay puertas seguras y pueden ser vistos por los demás, igual las mujeres van en grupos. “Es una situación muy incómoda”, dice Dayana, alumna de primer grado.
Adrián Cortés comenta que para que puedan dar clases o recibir clases los alumnos se tuvieron que acondicionar con lonas viejas para poder tapar la vista a la carretera. “Tuvimos que conseguir unas lonas viejas para ponerlas en el portón de la escuela, y para tapar la vista a la calle ya que los jóvenes no se concentraban en las clases”.
Todavía en los salones se alcanza a ver la escasez de butacas, hay jóvenes que tienen butacas buenas y hacen el esfuerzo por forrarlas y tenerlas en buen estado, pero hay otros que tienen sillas con marca de refresco, de las que se utilizan en las fiestas.
En este contexto, Axel Borón, alumno de primer grado e integrante de la FNERRR dentro de la escuela, comenta que las condiciones que esta la escuela son muy feas y precarias: “Yo tengo entendido que se han realizado grandes movilizaciones para que la escuela esté en mejores condiciones y que además están luchando por un terreno y la verdad es que sí hace falta, porque la escuela está en malas condiciones y sí necesita intervención del municipio y de las autoridades municipales y estatales”.
Recordando las movilizaciones que hicieron en el año, Adrián Cortés comentó que llegó un punto en que las marchas estaban en su máximo esplendor que la única intervención que realizó el estado fue para amenazar al pasado director diciéndole: “o le paras o te corremos”, después de esto tomó la decisión de cambiarse de escuela.
“A todo esto la misma realidad de los jóvenes que van todos los días con la intención de aprender y sobresalir en este país para ser mejores hay personas que no les importa en que condiciones están tomando clases los jóvenes, pero si fueran sus hijos fuera la primera escuela en ser atendida”, dijo el director del bachillerato ante el nulo apoyo de las autoridades para mejorar las instalaciones de la escuela”.
A su vez organizó una reunión con los alumnos más destacados y organizados en la FNERRR para explicarles la situación actual. “Aquí es muy importante que ustedes se den cuenta que, ante el apoyo nulo de nuestras autoridades, solo el Movimiento Antorchista nos está ayudando a construir las aulas que próximamente vamos a ocupar. Sigan luchando por mejores condiciones educativas que el Movimiento Antorchista los defenderá”, finalizó Adrián Cortés.
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