El Movimiento Antorchista, creado desde hace 48 años por el Maestro Aquiles Córdova Morán en organización con un reducido número de campesinos pobres en Tecomatlán, Puebla, siempre ha tenido claro que el arte y la cultura son herramientas claves en la defensa y progreso de las masas pobres de nuestro país.
En todas estas casi cinco décadas Antorcha ha emprendido una lucha férrea para lograr progreso en las condiciones de vida de los millones de mexicanos que han sido abandonados a su suerte por las autoridades, quienes a pesar de contar con los recursos monetarios producto de nuestros impuestos y que estos deberían tener el propósito de ser invertidos para que dichas condiciones de vida cambien, simplemente se los embolsan dejando a su paso un ejército de marginación; pero además se ha echado a cuestas la tarea de educar a las masas trabajadoras, y para lograrlo Antorcha tiene plena claridad que además de alimentar la conciencia del ser humano se debe alimentar su espíritu.
Un hombre que se educa a través del arte y la cultura no solo se limita a contemplar las injusticias en el mundo, sino que lucha para cambiar el sistema de cosas existente que en nada beneficia a las masas proletarias. Esto es lo que necesitamos, hombres que luchen todos los días para crear un país, mejor y más justo para todos,
En México el arte y la cultura han sido elitizadas por unos cuantos, que son quienes poseen a manos llenas recursos económicos para pagar los eventos culturales en grandes foros en donde se paladean exquisitas puestas en escena, sin embargo, los pobres, los que viven al día, esos no tienen acceso a este tipo de espectáculos a pesar de que éste es un derecho humano.
Es por eso que el Movimiento Antorchista en la medida de sus posibilidades se ha forjado como un ejemplo de que aquí sí se le da la importancia necesaria al arte y la cultura pues estas brillan con luz propia, forman un todo indivisible, una unidad sin la cual, las masas trabajadoras de este país estarían en ayunas de la energía que da vivir y practicar las bellas artes
En el actual régimen que estamos padeciendo hoy en día, el de la 4T, representado por López Obrador, ha sido castigada en especial el arte y la cultura, a pesar de ser actividades a los que todos los mexicanos tenemos derecho, y cada día vemos cómo descarada y groseramente se recortan recursos al fomento de las mismas. La reducción del presupuesto a la Secretaría de Cultura en el gobierno de AMLO fue según la periodista Sara S. Pozos (Milenio 20.11.21) en “2019 de mil millones de pesos, en 2021 la reducción llega al 5% menos que en el último año de Peña y un 35% menos al de Felipe Calderón.
Le pesa al jefe del Ejecutivo Federal el gasto ya minúsculo que destina a cultura, no quiere que el pueblo despierte del sueño donde solo el presidente tiene la razón y hay que aceptar todo lo que él ordene y mande. La cultura y la educación de un pueblo es veneno para los gobernantes dictatoriales.
La razón de fondo es que, a este régimen de la cuarta transformación, para prolongar su estadía en el poder después de 2024 le interesa y le es imprescindible que los mexicanos estemos más y más ignorantes de nuestras raíces, de nuestra cultura y de nuestra historia de lucha.
Y si alguna duda todavía nos queda basta observar cómo muchos estén conformes con unos cuantos pesos que se les entregan a través de tarjetitas, insuficientes por cierto para llevar una vida decorosa, a cambio de vender su conciencia y su alma al diablo y comprometer su voto, y esto a pesar de que López Obrador y su 4T no ha resuelto nada de lo que nos importa y preocupa a las mayorías: abatir la desmedida pobreza que sufren casi cien millones de mexicanos y que ésta en vez de disminuir crece por la gran desigualdad que reina en nuestra patria.
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