Resulta difícil, para quienes no hacemos investigación directa, tener una opinión firme y segura sobre lo que sucede en el país, especialmente en cuestiones tan delicadas y trascendentales como la seguridad pública, particularmente la de niños y jóvenes en edad de estudiar.
Sucede que, siempre que la información de los medios resulta dañina o desfavorable para la imagen del Gobierno, este sale a descalificarlos, acusándolos de falsear o exagerar los hechos para favorecer los intereses de los “conservadores” y los “neoliberales” corruptos que buscan sacarlo del poder. Esto no es para menos, pues es evidente que aquí sucede lo que reza aquel viejo refrán: "la verdad no peca, pero incomoda".
Violencia incontenible, homicidios y ahora la trata de menores son las tres plagas que se abaten sobre nuestros niños y jóvenes en edad de estudiar, y si queremos salvarlos, debemos resolver entre todos, no dejárselo sólo al Gobierno.
Por ello, lo más que podemos hacer los ciudadanos es diversificar, tanto como podamos, nuestras fuentes de información. No es suficiente, pero al menos demuestra nuestra buena fe.
Empiezo con la violencia. El 25 de agosto, Lisbeth Mejía Reyes, reportera de El Imparcial de Oaxaca, tituló su nota: "Al menos 102 homicidios contra menores en 2024". En la parte referente a mi tema, escribe: “… En lo que va del año, 102 menores en Oaxaca han perdido la vida a causa de homicidios, señalan las estadísticas de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).
De acuerdo con esos datos, en 89 de los casos fueron homicidios dolosos y, de ellos, 39 fallecimientos fueron a causa de accidentes de tránsito. Dos de ellos, a causa de detonaciones de arma de fuego, indica el documento que se puede consultar en el sitio de esta organización no gubernamental”.
Mejía Reyes dice más abajo:
"La Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) señala que, aun cuando la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes estipula que estos tienen derecho a vivir una vida libre de toda forma de violencia, en la realidad son víctimas de delitos del fuero común. Además de que estos incrementaron en 2024 considerando el mismo periodo de 2023”.
Luego detalla:
"Los delitos contra personas de 0 a 17 años que se han reportado a nivel nacional de enero a julio de 2024 son 22 mil 499, mientras que en los mismos meses de 2023 fueron 22 mil 353. Esto representa un incremento de 0.7 % anual”.
Pero el daño no se reduce a esto. Según la información disponible, los delitos contra personas de 0 a 17 años que se han reportado a nivel nacional de enero a julio de 2024 son 22 mil 499, mientras que en los mismos meses de 2023 fueron 22 mil 353. Esto representa un incremento de 0.7 % anual.
En tanto, el estado de Oaxaca no escapa a ese contexto de violencia, pues 436 menores de edad fueron víctimas de delitos como las lesiones (266 casos), los homicidios (102), la corrupción de menores (18), trata de personas (10), feminicidios (2) y extorsión (1), como se observa en el contador de la Redim.
Citlalli López Velázquez, del portal de NVI Noticias, publicó el 1 de julio:
"La trata de personas es un delito que tiene en la mira a niñas, niños y adolescentes del estado de Oaxaca, con lo que, a nivel nacional, la entidad ocupa el noveno lugar por número de víctimas entre 0 a 17 años de 2015 a mayo de 2024”.
López Velázquez comenta que, de acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), la trata de personas de 0 a 17 años es un delito que afecta mayormente a las mujeres; el 74.7 % de los casos reportados a nivel nacional de enero de 2015 a mayo de 2024.
Yésica Sánchez Maya, integrante de la dirección colegiada de Consorcio Oaxaca, no desdeña que aún hay desafíos por parte del estado para asumir y garantizar el ejercicio de los derechos de las infancias, como lo estipulan las leyes en la materia.
Además, ha faltado la coordinación de los tres órdenes de gobierno para revisar los presuntos casos de explotación infantil y para garantizar todos los demás derechos de las y los menores de edad.
“Ha habido instancias creadas para la garantía de mejores condiciones de bienestar para las infancias, pero el problema es que el enfoque de la reforma a la ley (de protección de derechos de niñas, niños y adolescentes) es asistencialista, no de derechos... Hubo un retroceso con la ley”, explicaba la activista en abril a este medio, refirió Sánchez Maya.
Todo lo anterior nos indica que, junto con la violencia, hay otros factores negativos que explican tan terrible descomposición social. Por esto, cada vez que se acerca el Día del Niño o el del Estudiante, llueven cifras y descripciones abrumadoras sobre la explotación del trabajo infantil, la falta de oportunidades para adolescentes y jóvenes, y la situación de pobreza lacerante de sus familias, que los obliga a abandonar la escuela para trabajar en lo que sea, con tal de contribuir al gasto familiar.
En Oaxaca y México estamos muy lejos de garantizar un empleo formal, con salario digno y verdadera protección social a toda la población económicamente activa, por lo que no sorprende que niños y jóvenes queden totalmente fuera del radar de patrones, gobierno y autoridades laborales.
Violencia incontenible, homicidios y ahora la trata de menores son las tres plagas que se abaten sobre nuestros niños y jóvenes en edad de estudiar. Por eso, termino diciendo: ¿qué futuro estamos labrando para las nuevas generaciones? Pienso, con toda honestidad, que aquí hay un problema que debemos resolver entre todos, y no dejárselo sólo al Gobierno si queremos salvar a nuestros hijos de un futuro de violencia y atraso en todos los órdenes.
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