Durante dos días, un grupo representativo de productores de la zona indígena del Mezquital afiliados a la Organización Antorcha Campesina, se apersonaron a las afueras de la Secretaría de Bienestar, esperando ser atendidos por el Delegado Federal el Lic. Iván Ramírez Maldonado, la reunión no se concretó, a pesar de que dicho funcionario se encontraba presente en su cómoda oficina. El motivo de la presencia de los campesinos, es porque a pesar de haber cumplido con todos los requisitos para recibir el beneficio del programa "Producción para el Bienestar", ( antes denominado Procampo), que se debiera entregar en los meses de marzo y abril y que es indispensable para cubrir algunos gastos para preparar la tierra, así como para adquirir insumos agrícolas no se ha entregado, el último pretexto que manejó la dependencia es que pasando el proceso electoral se dispersaba el apoyo.
A más de 3 meses de dicho proceso electoral, los campesinos ya no aguantaron más y decidieron acudir directamente a la delegación de Bienestar, el delegado no se dignó atender a los campesinos, y envió al Ing. Víctor Llamas para "informar" que se está realizando por instrucciones centrales una "rectificación de las parcelas agrícolas, así como de las listas de productores que se anotaron para ser beneficiados con el programa" y que mientras no concluya dicha rectificación se detienen los apoyos, pero además, no se comprometieron a dar fechas de entrega, pero les aseguro que pronto tendrán noticias.
Y para tratar de endulzar el oído de los impacientes campesinos, les informó que cuando reciban el apoyo, se les entregará en efectivo y que el próximo año se les darán tarjetas bancarias para que puedan acudir directamente al banco del bienestar, en resumen, puras promesas.
Antes de continuar, quiero hacer un pequeño paréntesis, la manifestación campesina, fue absolutamente pacífica, no se afectó el trabajo de los funcionarios, no se cerraron los accesos y se respetó el libre tránsito a las personas que acuden a realizar sus diversos trámites, no se ofendió a nadie.
Seguimos. La queja de los campesinos, es completamente real, no se están buscando problemas artificialmente, los campesinos vinieron a manifestarse por su propia voluntad para reclamar la entrega de un recurso que ellos han recibido por muchos años y que cumplen a cabalidad con todos los requisitos.
No debemos olvidar que los verdaderos culpables de los problemas y molestias que causan las movilizaciones populares no son los marginados que salen a las calles como un recurso extremo, sino de los funcionarios insensibles.
Pero lo más grave es que este gobierno se ha dedicado a lanzar su famosa política de austeridad, la cual no es otra cosa que adelgazar las funciones de gobierno, despedir personal, cancelar programas sociales, invertir menos en salud y educación, nos venden la idea de que con la austeridad se combate el despilfarro, la opacidad en el manejo de los recursos y que es el mejor antídoto para acabar con la corrupción, pero la verdadera razón de esta política es la de recortar el presupuesto que se dedica a los más pobres. Los programas sociales destinados al campo son de los más afectados, se eliminó el programa ganadero, el de apoyo a la Comercialización, el de Atención a Jornaleros Agrícolas, Empleo Temporal, el programa de fertilizantes, se eliminaron los apoyos para obtener maquinaria agrícola, proyectos agropecuarios, desapareció el programa Prospera, la cancelación de las caravanas de la salud destinadas fundamentalmente a las zonas rurales.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), y sus Centros de apoyo al desarrollo rural (Cader), le redujeron significativamente su función como la encargada de los programas para el campo, hoy, está Secretaría está prácticamente desmantelada, pues sólo es la ventanilla receptora de la papelería que cada productor entrega, pero la operatividad y entrega de los apoyos los maneja la Secretaría de Bienestar con sus famosos siervos de la nación.
Los campesinos afiliados al Movimiento Antorchista saben que sólo organizados pueden elevar su voz, que solo organizados serán escuchados sus reclamos y denunciar los atropellos de funcionarios elitistas y que sólo obedecen a sus superiores, pero, sobre todo, que la organización popular es el instrumento para alcanzar una vida mejor.
Prometieron regresar los Antorchistas y ampliar la protesta hasta encontrar una respuesta positiva, si el sr delegado no quiere ver en sus oficinas a los indígenas organizados, pues que haga lo pertinente y de solución al reclamo.
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