Los institutos nacionales de salud y hospitales de alta especialidad tendrán que apretarse bien el cinturón en el 2020, ya que a 18 de ellos les metieron tijera en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) y contarán con 4 mil 066 millones 423 mil 095 pesos menos en comparación con el 2019, cuando ya de por sí registraron casos de desabasto y problemas para contratar servicios subrogados. El Instituto Nacional de Cancerología es el más afectado, ya que se le asignó un presupuesto de mil 409 millones 991 mil 855 pesos, lo que representa una disminución de 727 millones 522 mil 703, y para este año contó con 2 mil 137 millones 514 mil 558. Incluso su presupuesto para el próximo año es menor a los que tuvo en 2018 y 2017.
Qué lamentable situación, solo Dios y ellos saben el sufrimiento de estas personas, tanto de los que sufren esa enfermedad, como las madres de esas criaturas, mal no estaría que el señor tan insensible del presidente fuera a los hospitales donde hay sufrimiento, donde sí no tienes para pagar, no te atienden. ¿Dónde está el Seguro Popular?, ese que, aunque hubiera "corrupción", como este señor dice, mínimo no se descuidaba a esta clase de gente tan vulnerable; ese al que con toda confianza llegabas y te atendían, o mínimo sabías que lo harían sin problema. Ese seguro que mínimamente te daba tranquilidad y no te apurabas por el dinero, sino por tu enfermo únicamente, ese donde tenían la medicina para que sufriera menos tu enfermo. Lo lamentable, señoras y señores, es que se acabó, ya no hay nada, ya solo queda esperar hasta que tu enfermo termine su agonía, que es lo más triste y lo más lamentable, solo el que lo ha pasado sabrá de lo que estoy hablando.
Treinta millones de mexicanos se han equivocado al elegir a un presidente comodino, mentiroso, incongruente, demagogo, incapaz, pero sobre todo insensible, al que solo le importa el poder y el dinero, y quedar bien con los que le financiaron la campaña, esos a los que él les decía "la mafia del poder". Así catalogó durante 18 largos años, a Emilio Azcárraga, a Salinas Pliego, a Alfonso Romo, a Hank Rhon, etc. Esos sí le importan ahora. A los pobres y enfermos solo les da importancia cuando los necesita, solo son importantes cuando van a llegar las elecciones, dándoles playeras, llaveros, despensas, tinas; los hace ver en ese momento como los más sabios; se pone un antifaz, que estoy seguro de que ellos mismos se desconocen de tantas y tantas mentiras que expresa.
Desgraciadamente, esto pasa y pasó durante las elecciones: volvieron a engañar, a mentir y hasta se llevaron entre las "patas", como se dice coloquialmente, a los gobernantes de los diferentes municipios, ya hasta las instituciones están totalmente monopolizadas, ahora ya no son instituciones autónomas, como es el caso de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), por cierto dirigida por una mujer a modo del presidente López Obrador, la licenciada Rosario Piedra, que realmente le hace honor a su apellido por su incapacidad para cumplir con el deber que su cargo le manda y que solo está para hacer lo que su jefe le ordena; también últimamente la institución que se supone que es un órgano autónomo y que ya ahora está a punto de ser tomada a la mala y controlada por el ejecutivo federal, como es el Instituto Nacional Electoral (INE).
Ahora ya no se puede hacer nada, por la simple razón de que dice el presidente de la República que hay "corrupción", cosa de la que no hay pruebas absolutas; que la había, no lo dudo, pero para eso hay instituciones que se encargan de hacer las debidas investigaciones para que se castigue a los culpables. Pero, por qué cercenar de tajo las participaciones y dejar de hacer las obras para la gente, si se supone que él en su eslogan de campaña dijo una y mil veces que "primero los pobres", ahora se podrá interpretar de diferente manera, y la pregunta sería ¿los pobres qué? Es algo qué no podremos saber a ciencia cierta porque nunca lo dirá, seguirá engañando y mintiendo como siempre lo ha hecho y en cada discurso, hasta que las mentiras se desvanezcan como el polvo, y la gente se pregunte: ¿por qué elegimos a alguien como este?
Para ese momento estará listo el Movimiento Antorchista Nacional, presente y más fuerte que nunca para demostrar que se puede gobernar con inteligencia, con sentido de justicia y tomando en cuenta que el verdadero problema de este país es la pobreza y no la corrupción. Los antorchistas jamás se han olvidado de que los pobres son lo primero, y lo han demostrado en muchas ocasiones en que sin ser gobierno han ayudado a miles y miles de personas en muchos aspectos. El día llegará en que se pueda demostrar cómo se debe gobernar este gran país.
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