El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, fue elegido con la promesa de acelerar el crecimiento y la prosperidad, y de cambiar radicalmente el rostro de México, es decir, brindarle una vida mejor a los cerca de 90 millones de mexicanos que viven en la pobreza y desigualdad social. Así pues, López Obrador se jacta que su administración es la "Cuarta Transformación" de México, como otro momento decisivo de la historia del país después de los periodos de la Guerra de Independencia y Reforma del siglo XIX y la Revolución de principios del XX.
Quizá López Obrador sea un "buen historiador", pero es un mal gobernante y en economía ni se diga. Esta administración está por concluir, al no tener satisfechas sus desatinos, la 4T sigue empecinada y asegura que si aún existe estancamiento y miseria en el país es porque los "conservadores", "fifís", "neoliberales" y "la mafia del poder" han creado un plan para desestabilizar y frenar a como dé lugar los "logros" obtenidos.
Pero cuáles son esos logros que presume a diestra y siniestra el Presidente? Según él, su gobierno eliminó del poder la corrupción y sustituyó el sistema neoliberal por uno más justo, sin embargo, las cosas siguen igual, los pobres ya perdieron las esperanzas que la "Cuarta Transformación" esté dando resultados con la creación de empleos bien pagados, educación gratuita y de calidad, servicio médico universal, sólo por mencionar algunas de muchas necesidades que padecen los trabajadores de México.
Nuestro país no logra salir de una crisis económica severa y profunda, la inflación no cede, situación que evidencia más las debilidades del Presidente de la República: el desempleo, salarios injustos y crisis del sistema de salud de la que no hemos podido salir y lo peor, la enorme pobreza, estos males contradicen abiertamente los supuestos proyectos de "reactivación económica" y las promesas de una "transformación revolucionaria", como propuso López Obrador. En efecto, nos enfrentamos a una crisis terrible, pero las respuestas torpes y comportamientos erráticos sugiere que nuestro país se encamina hacia un abismo sin fondo, así también lo pronostican varios expertos y ONG que dudan que la pobreza en México haya disminuido como reportó el Coneval.
Un análisis de Signos Vitales México expone que 23 por ciento de los hogares con los ingresos más bajos recibía algún apoyo social y esta proporción se redujo a nueve por ciento en 2022. Otro índice es el aumento de personas sin acceso a servicios de salud. De 2018 a 2022, 30 millones más de personas enfrentaron esta carencia social.
Por su parte, Mariana Campos, directora general de México Evalúa, mencionó que la inversión en salud y educación es importante para mejorar la movilidad social; sin embargo, destacó que las políticas del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no han sido eficientes en estos rubros.
Por lo anterior, es una obligación decir que el partido en el poder demostró incapacidad para gobernar, que la austeridad republicana y la "4T" no son más que un engaño, por lo que millones de mexicanos ya perdieron sus esperanzas en el lema "por el bien todos primeros los pobres", de que vamos "requetebién", que es falso que se ha domado la miseria pues hasta el momento los mexicanos siguen esperando la ayuda prometida para enfrentar la pandemia del hambre.
Es menester recordar que Morena sostuvo que gobernaría con responsabilidad para sacar de la pobreza a los mexicanos; nada más falso. Chiapas y Tabasco están entre los estados con mayor rezago social a nivel nacional, en Veracruz existen aproximadamente 6.1 millones de pobres de una población aproximadamente de 8.1 millones de habitantes, además esta entidad se mantiene como la segunda más violenta e insegura de México y es la misma política que se viene dando en los Estados y municipios donde gobierna Morena.
En síntesis, el lema "Juntos haremos historia" tuvo en sus manos la oportunidad de demostrar y ofrecerle a los mexicanos progreso y justicia social, derechos que por muchos años López Obrador exigió a los gobiernos que le antecedieron. AMLO sigue siendo un hombre con poder económico y político, pero lamentablemente sigue con su política de "tengo otros datos", y en estos momentos críticos como los que estamos viviendo se requieren acciones concretas y no rollos mareadores de los que todos ya estamos hasta el cansancio.
Los tropiezos y desatinos de López Obrador y su partido Morena nos deben poner a reflexionar a todos, pues la pobreza, marginación y carencias que padece la inmensa mayoría de la población aún sigue y no se ha hecho absolutamente nada para erradicarlo. Las circunstancias nos obligan, ahora sí, a tomar mejores decisiones. Como ya es del dominio público, se acercan las elecciones del 2024, y para ello se vuelve necesario un bloque de hierro, una fuerza popular conformado por obreros, campesinos, comerciantes y empresarios; amas de casa, profesionistas y estudiantes para unirnos y de manera democrática, evitar a toda costa que López Obrador continúe su control en el Poder Ejecutivo y sobre los otros poderes de la nación, asimismo crear las condiciones para que el pueblo organizado conquiste el poder de la nación, solo así lograremos el progreso anhelado.
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