En pleno 2024 son miles de familias, en el estado de Guanajuato, las que enfrentan un verdadero viacrucis para poder escriturar los predios que habitan, en la mayoría de los casos, desde hace más de 25 años, a consecuencia del burocratismo e insensibilidad de los tres niveles de gobierno, señalo Marcos Pérez García, líder estatal del Movimiento Antorchista, quien advirtió que desde hace 50 años a través de la lucha, su organización ha logrado dar certeza jurídica a miles de familias en todo el territorio nacional.
“Todo mexicano tiene derecho a tener, disfrutar y disponer de un inmueble, que cuente con la protección de ley donde nadie pueda molestarlo y pueda vivir de manera digna y decorosa con su familia. Y aunque este es un derecho humano y esta contemplado en nuestra Carta Magna la realidad es que, al día de hoy, son millones de personas las que no tienen una vivienda propia y muchos de los que sí la tienen no cuenta con una escritura pública de su terreno. Y aunque el Estado tiene la obligación de garantizar que se cubra este derecho, lo cierto es que, siguen existiendo muchos cinturones de miseria alrededor de las grandes metrópolis.
En el caso de Guanajuato capital, quinientas familias de las comunidades La Venada y Presas de Guanajuato recorren un tortuoso camino desde hace más de dos décadas, ante lo cual recurrieron a solicitar el respaldo y la solidaridad del Movimiento Antorchista, quien en tres años ha intensificado las gestiones y gracias a ello esta próximo a resolver tan sentida demanda de los colonos”, señaló el líder social.
Para dar seguimiento al compromiso de la autoridad municipal de agilizar la regularización de los predios, una nutrida comitiva de vecinos acudió a las oficinas de la Dirección de vivienda del H. Ayuntamiento de Guanajuato, para entrevistarse con su titular, Amador Rodríguez Ramírez, a quien solicitaron que se les de a conocer las razones del atraso en la regularización de sus predios. El funcionario municipal les explicó que siguen realizando algunos tramites administrativos de la traza de las colonias y que a más tardar en un mes se iniciará con la recolección de los expedientes de los posesionarios y así concluir el proceso de escrituración. Sin embargo, la mayoría de los ahí presentes, le recordaron que, están cansados de la insensibilidad y tortuguismo con que se ha llevado el procedimiento y le reiteraron la urgencia de contar con un documento que les garantice la propiedad legal de sus predios y con ello evitar que alguien pueda despojarlos de sus hogares.
Los colonos, después de escuchar al director de vivienda y antes de regresar a sus comunidades, advirtieron que se mantendrán atentos a que haya celeridad en el proceso y en caso de no ser así, le hicieron saber que incrementarán las movilizaciones, que irían desde mítines y marchas, hasta llegar a instalar un plantón permanente frente a sus oficinas para que se cumpla la palabra empeñada. “la burra no era arisca, la hicieron los palos”, y la lucha nos ha enseñado que solo con unidos y organizados lograremos una vida más digna para nuestras familias.
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