Con base en datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), al término de 2022, la pobreza en México se iba a incrementar en 2.3 por ciento, es decir, dos millones 500 mil mexicanos más están en condiciones de pobreza para inicios de este 2023. Por su parte, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) reveló que, entre el segundo y tercer trimestre de 2022, la pobreza laboral aumentó a nivel nacional, al pasar de 38.3 por ciento a 40.1 por ciento.
Asimismo, otros medios publicaron, a finales del año que acaba de concluir, que alrededor de 18 millones de mexicanos se suman a la pobreza en los primeros dos años de la 4T. En 2018, había 49.5 millones de mexicanos en pobreza y para el 2020, esta cifra se incrementó a 55.7 millones, es decir, 6.2 millones más. Mientras que en 2018, había 54.7 millones de mexicanos con ingreso inferior a la línea de pobreza y para el 2020, subió esta cifra a 66.9 millones, es decir, 12.2 millones más.
La organización civil mexicana Acción Ciudadana Frente a la Pobreza en su comunicado 31/22 con fecha octubre 05 de 2022, reporta que en México 35 millones 582 mil personas trabajan, pero carecen de ingreso suficiente para adquirir dos canastas básicas, lo indispensable para superar el umbral de pobreza de una familia de dos personas. Quienes tienen un empleo, 22 millones 100 mil personas con trabajo asalariado tampoco ganan lo suficiente. Los bajos salarios son la principal causa de la pobreza en México.
El organismo no gubernamental señala que los bajos salarios son la principal causa de la pobreza en México. No hay políticas o programas sociales que puedan sustituir al trabajo digno como la vía sostenible para la superación de la pobreza. Los datos del Coneval confirman el diagnóstico, pues muestra que desde 2005, alrededor del 40 por ciento de la población no gana lo suficiente para adquirir la canasta alimentaria, es decir su ingreso laboral los pone en pobreza extrema. Estos datos explican el por qué a lo largo de los años la pobreza en México no ha bajado significativamente.
Ahora bien, por qué a cuatro años de la 4T hay más pobreza si el presidente Andrés Manuel López Obrador ha hecho de su lema emblemático, “por el bien todos, primero los pobres”, una frase de discurso que repite todos los días y a todas horas, pero a pesar de ello en 2020 se encontraban en pobreza multidimensional el 43.9 por ciento de la población, 55.7 millones de personas, y en pobreza extrema 8.5 por ciento, equivalente a 10.9 millones de personas. El incremento en la carencia de acceso a la salud fue la que mostró un salto importante en ese año, pasó de 16.2 por ciento, en 2018, a 28.2 por ciento, en 2020. Todas las respuestas coinciden con las que señala la Cepal.
El organismo regional señala que los malos resultados de López Obrador en materia de combate a la pobreza obedecen a una política social regresiva y más neoliberal que la de sus antecesores, en la que aumentaron los subsidios a los ricos y bajaron las transferencias a los hogares más vulnerables.
Al respecto, sociólogos de El Colegio de México, afirman que AMLO destina incluso menos recursos que Peña Nieto, en términos proporcionales al Producto Interno Bruto (PIB), en el financiamiento de programas sociales. El financiamiento de los programas sociales durante los primeros cuatro años de Peña Nieto fue equivalente a 5.07 por ciento del PIB, mientras que en los primeros cuatro años de López Obrador el porcentaje bajó a 4.45 por ciento.
Así se explica el por qué, a cuatro años de comenzada la estrategia de rediseño de la política social en el país, el gobierno actual no logra poner primero a los pobres, como sí lo hacía el gobierno del sexenio anterior, al menos en términos relativos frente al gobierno de AMLO.
Aunado a lo anterior, todos sabemos que los hogares más pobres se vieron severamente afectados por la estrategia de austeridad republicana, la desaparición del programa Prospera, el Seguro Popular y porque el presupuesto no ha priorizado los programas dirigidos a la población en situación de pobreza.
Estamos a menos de dos años para que termine el sexenio de la 4T. En esta recta final del gobierno morenista, bajo ninguna circunstancia se puede dejar a un lado la tarea de quitarle la venda de los ojos al pueblo de México, para que deje de creer en falsos mesías y en una 4T que sólo hace más pobres a los mexicanos, ignorantes y enfermos, mientras reparte el dinero de todos los mexicanos con fines electorales, el problema es que se está fingiendo que se salva a los humildes, pero por otro lado se les afecta mucho más a cambio de becas o apoyos, no se les da en construcción o rehabilitación de escuelas, vivienda, clínicas o agua potable.
Lo único que quiere López Obrador es conservar el poder con el voto de los pobres, a los que les está comprando la conciencia por el hambre y la miseria que sufren. Es una estrategia política como el mismo confesó en una de sus mañaneras, en la que el presidente afirmó que “ayudar a los pobres es parte de su estrategia política, porque ellos regresan el apoyo respaldando a la 4T”.
Señaló en su conferencia mañanera que con la gente pobre se va a la segura, no como con los sectores de clase media, los de arriba o la “intelectualidad”. “Ayudando a los pobres va uno a la segura porque ya saben que cuando se necesite defender, en este caso la transformación se cuenta con el apoyo de ellos".
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