* El pozo de agua está sin operar desde el 7 de diciembre
Chimalhuacán, Edomex. Desde el 7 de diciembre, la población de la Unidad Habitacional El Molino no tiene agua potable. El pozo presentó fallas, dejando de bombear agua a la red de distribución. La presidenta municipal, Xóchitl Flores Jiménez, y la directora del Odapas, Miriam Lira, no han resuelto el problema, afectando a más de siete mil ciudadanos.
Los vecinos, al acudir nuevamente al pozo, denunciaron que el encargado no se había percatado de las fallas y que el personal del Odapas llegó cuatro días después para realizar una revisión del sistema operativo.
Misael Miguel, director de Operación, encabezó la inspección, pero surgieron varias versiones sobre las causas del problema.
Según el director de Gobernación, José Buendía Romero, los vecinos deben saldar adeudos y aportar más de tres mil pesos para restablecer el servicio, lo que generó protestas inmediatas.
Habitantes como Ivet Vega señalaron que la administración municipal perjudica tanto a quienes están al corriente en sus pagos como a los deudores.
El ayuntamiento ofreció distribuir agua en pipas, pero los vecinos afirmaron que el suministro es insuficiente para cubrir las necesidades básicas de las familias, que en promedio constan de cinco o seis miembros.
El pozo de El Molino opera con tres bombas que llenan una cisterna y permiten que el agua llegue a los mil 500 departamentos. Sin embargo, los encargados del Odapas no tienen un diagnóstico claro sobre los daños ni una solución definida, lo que ha llevado a los residentes a exigir la intervención de la Comisión de Agua del Estado de México (CAEM).
Ante la falta de respuesta, los vecinos han organizado guardias para evitar que se desmantele el pozo y han realizado bloqueos en la Cabecera Municipal para presionar a las autoridades.
Sin información precisa sobre la reparación, temen quedarse sin agua durante las vacaciones decembrinas.
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