A la vuelta de la esquina está la elección del 2 de junio de 2024, en que se estima que más de 95 millones de mexicanos acudirán a las urnas para elegir al nuevo presidente o presidenta de la república; se elegirán además 128 senadores, 500 diputados federales y se renovarán nueve gubernaturas, incluida la Ciudad de México, así como 30 congresos locales.
En Querétaro, además de los legisladores federales se elegirán: 18 alcaldes y 25 diputados locales. Como en otras entidades, aunque formalmente no se ha declarado la Alianza “Va por México” con los partidos del PAN, PRI, PRD, todo apunta a que irán juntos, mientras Movimiento Ciudadano (MC) de Dante Delgado y el Partido Verde se evidencian como los prostitutos políticos que siempre han sido, haciendo alianza con el partido de Andrés Manuel López Obrador.
En el PRI, escaso de cuadros consecuentes, tampoco han definido a sus candidatos, y sin resultados prodigiosos, su dirección estatal avanza paso a paso, de la mano de políticos como José Calzada, Paul Ospital, Graciela Juárez o la misma dirigente estatal, a pesar de la enorme losa de desprestigio que pesa sobre su dirigente nacional, Alejandro Moreno.
Los acuerdos entre equipos de políticos comerciantes apenas empiezan a vislumbrarse. Entre los posibles candidatos para la capital se menciona a la secretaria de Gobierno, Guadalupe Murguía, al diputado Felipe Fernando Macías, del PAN, a Arturo Maximiliano, Mauricio Ruiz y la rectora Teresa García Gasca de Morena y a Abigail Arredondo por el PRI.
Los políticos han iniciado su labor de convencer a la población con sus acostumbrados programitas de tinacos, calentadores y jitomates para repetir en sus cargos.
Para el Senado de la República, puestos clave, Luis Nava, Roberto Sosa y Rogelio Vega, por el Partido Acción Nacional, y Gilberto Herrera y Santiago Nieto. Hasta ahora, el ambiente para el electorado es confuso.
Los grupos panistas en el poder, confiados, no dudo que no estén trabajando metódicamente, pero haciendo alianzas cada quien por su lado, y a pesar de que tienen todos los recursos económicos y humanos, no todos están haciendo la chamba para repetir en sus puestos o para alcanzar nuevas aspiraciones.
Por ahora el trabajo es cúpulas, repartiendose las posiciones. Pero ¿qué opinan los ciudadanos queretanos de los políticos en el poder y de sus posibles candidatos? Todos han iniciado su labor de convencer a la población con sus acostumbrados programitas de tinacos, calentadores, tarjetitas, jitomates, proyectos de servicios, para repetir en sus cargos, imponer a sus familiares o a sus socios en política.
¿Les alcanzará? Como el agorero Calcante, para el panismo, por hoy no todo está perdido, pero tampoco ganado. Se advierten descalabros. La soberbia no es buena consejera.
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