De la misma forma en que una imperfección del rostro se puede encubrir con maquillaje, los defectos o incumplimientos de un gobierno pueden ser maquillados.Eso sí, esto no implica que la realidad se transforme, tan sólo cambia la manera en que la percibimos o la forma en que se nos representa.Por lo regular, cuando se recurre al maquillaje o encubrimiento se trata de situaciones malas o que no conviene exhibir ante los demás, a diferencia de cuando las cosas se hacen bien o son bonitas, así, por ejemplo, la Mona Lisa existe para disfrute y curiosidad de la humanidad.
El estado se nos presenta como un ente encargado de hacer valer la voluntad y peticiones de la mayoría relativa de la sociedad, misma que, por medio del voto secreto y universal lo designó para cumplir un periodo determinado de administración.Su obligación consiste entonces en proveer o regular las necesidades básicas de la sociedad (país, estado, municipio, barrio, etc.), como son: acceso a la salud, acceso a una vivienda, seguridad pública, educación, agua potable, entre otras.Se convierten en "Servidores Públicos", están al servicio de la sociedad, por lo tanto, deben dar resultados y atender las demandas del pueblo.
De la misma manera en que alguien sentenció: lo que no se mide no se puede mejorar, los gobiernos deben medirse y mejorarse puesto que de ello depende el bienestar de toda una población.Pero, cuando no se cumple la palabra empeñada con la sociedad y se empieza a reflejar un mal trabajo por parte de un gobierno, se recurre de manera automática a tratar de maquillar o representar ante los demás una realidad paralela a la que el ciudadano de la calle percibe.
En este sentido, me resulta difícil de entender y me rehúso a creer, la realidad que plasma la casa encuestadora Massive Caller, con fecha 13 de julio del presente año, donde para sorpresa de miles de sonorenses la gobernadora del partido tricolor, Lic.Claudia Pavlovich Arellano, aparece como el número 4 con mayor aprobación de los ciudadanos, honroso lugar dentro de un margen de 32 gobernadores evaluados.Nada mal para la gobernadora, el 61.2 por ciento de los sonorenses reconocen y aplauden su encomiable labor por Sonora.
Para los sonorenses de a pie, los de carne y hueso, los que con sus músculos y nervios mueven la economía de este estado, esto resulta del todo sorprendente porque pareciera entonces vivir realidades paralelas.La mentira con el tiempo se desvanece y da paso a la verdad, la mentira mal dicha cae por su propio peso.La misma encuesta a modo nos permite señalar un dato que no cuadra con la realidad.Según Massive Caller Pavlovich tiene mucha aceptación social, pero, en materia de percepción de inseguridad se va hasta el lugar 22, es decir, que los sonorenses en la calle y en su casa se sienten en peligro por el ambiente de violencia.
Caso contrario al gobernador de Yucatán, que, ocupa el primer lugar en aprobación y se corresponde siendo el estado con menor índice de percepción de inseguridad.No hay punto de comparación.Está ella bien calificada, pero la población temblando de miedo en sus casas, el equivalente es: un alumno de matemáticas con boleta de diez sin saber hacer suma de quebrados.Otro dato negativo es el nivel de pobreza entre la población, de acuerdo a Coneval (2018) cerca de 1 millón 130 mil sonorenses viven en situación de pobreza y cerca de 256 mil personas no tienen ni para comer.¿Se imagina usted al 61 por ciento de los sonorenses poniéndole palomita a este gobierno con estos datos?, ¿no es esto maquillar la realidad?
Algo no cuadra.Por eso el Movimiento Antorchista de Sonora desde antes de la pandemia maldita lo advirtió, en consecuencia, durante todo lo que lleva la administración hemos venido exigiendo que se deje de mentir y se haga algo para remediar los males sobre todo de las familias más pobres, mediante mítines, marchas, volanteos, todo lo que nuestro derecho a la manifestación y petición nos permite apegado a la ley sin quebrantarla.Basta de ya de simulación, esa misma actitud de pretender cambiar Sonora a base de comerciales y de tuits, es la que nos tiene en semáforo rojo de infección por la covid-19.
Los activistas conocemos cómo viven la gente y los barrios y comunidades olvidados por el gobierno, gentes viviendo sin luz y a 45° de calor, familias enteras en casas de desechos, hogares en donde aún no se conoce qué es una taza de baño, familias sobreviviendo a la semana con dos kilos de frijol, por decir algo, y sin intención de romantizar la pobreza, ese es el Sonora profundo, el olvidado, el verdadero Sonora, y por el cual nos hemos propuesto en Antorcha dar la lucha hasta donde tope.¿Por qué a ese otro Sonora no se le encuestó para determinar la calificación de la gobernadora?
Compañero antorchista, dispongamos nuestra energía para dar la lucha contra la simulación y el maquillaje, el primer paso es luchando por arrancarle al gobierno obras y servicios, aunque sea necesario salir a la calle; el segundo paso es educarnos políticamente, estudiar y comprender nuestra realidad, sólo de esta manera nos libraremos de falsedades y sombras que pretenden mantenernos adormecidos.Con Antorcha venceremos.
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