Hace unos días apareció en la página oficial del superdelegado de Bienestar en Baja California, Jesús Ruiz Uribe, un video en el que hacía alusión a lo que él llamó “un atropello”, comenzando por calumniar a nuestra organización y enumerando una serie de descalificaciones sin sustento alguno, utilizadas únicamente para generar odio hacia Antorcha. Pero cualquiera que conoce a nuestra organización sabe que, de los casi dos minutos que habló el funcionario, nada de lo que dijo es verdad.
No pedimos nada regalado, exigimos que los impuestos que pagamos cada uno de nosotros se materialicen en programas y proyectos, en bienestar para los mexicanos.
Es importante señalar que al delegado no le informaron correctamente sobre qué pedimos los antorchistas, cuál es nuestra demanda ni cómo sucedieron los hechos. Por alguna razón, el funcionario afirmó que fuimos en búsqueda de becas para estudiantes, lo cual es una total mentira, pues en esa movilización no participaron estudiantes.
Acudieron amas de casa y obreros que decidieron luchar por demandas legítimas, que incluso la presidenta de la república, Claudia Sheinbaum, se comprometió a cumplir: un programa de vivienda popular para las familias que más lo necesitan y un servicio de salud gratuito para todos aquellos que no lo tienen.
La demanda es justa y, hasta cierto punto, el programa también lo es, tal como lo ha planteado la presidenta. Aquí algunos datos: en 2024, México sigue enfrentando un déficit significativo de vivienda, estimado en más de ocho millones de unidades.
Este déficit incluye tanto la falta de viviendas nuevas como la necesidad de mejoras y ampliaciones en las ya existentes. El índice SHF de precios de la vivienda mostró un aumento en el primer semestre de 2024, con una variación positiva de 10.1 % en la vivienda nueva y 9.0 % en la usada.
Particularmente en Baja California, la situación es crítica. En 2024, el estado enfrenta un déficit de más de 300 mil viviendas. Esta escasez se debe a la falta de vivienda económica y a la necesidad de mejorar las ya existentes. Baja California se encuentra entre las entidades que menos vivienda económica producen en el país.
Los datos son reveladores: con un incremento del 218 %, el precio de la vivienda en Baja California alcanzó su mayor nivel en una década al cierre de 2024. El precio promedio de una casa de interés social pasó de 609 mil 503 pesos a 1 millón 938 mil 669 pesos, según Luis Roberto Valero Berrospe, presidente del Centro de Estudios Económicos del estado.
Y esto es sólo en materia de vivienda. En cuanto a la salud, el panorama es aún más grave. De las afiliaciones al sistema de salud universal que dijeron se implementarían en todo el país, poco o nada ha sucedido.
En los casos en los que sí se han realizado, los hospitales no tienen personal ni atención suficiente, y, peor aún, cuando se logra ser atendido, no hay medicamentos, ni siquiera de los recetados por los propios médicos. Esta cruda realidad la viven miles de bajacalifornianos que no cuentan con recursos para acudir a un hospital privado.
De estas carencias sufrimos miles de mexicanos. No pedimos nada regalado: exigimos que los impuestos que pagamos se materialicen en programas y proyectos reales, en bienestar para los mexicanos. Exigimos que cumplan lo que ellos mismos dijeron que harían.
Por estas razones, los antorchistas estamos preparados para volver a salir a las calles y exigir que se cumplan estos derechos. Hoy hacemos un llamado a todos los sin casa, a los que no tienen salud, para que juntos, como un solo hombre y con un solo ideal, vayamos a exigir a Bienestar que cumpla lo que tanto prometió.
Estemos preparados, compañeros, porque la lucha continúa. Ni un paso atrás en la defensa de nuestros derechos. Atentos al llamado, por la defensa de nuestra organización y de los pobres de México.VVVVV
0 Comentarios:
Dejar un Comentario