El domingo 4 de junio, se disputaron las gubernaturas de dos estados del país, entre el partido oficial Morena y sus aliados, y la alianza PRI-PAN-PRD. El resultado fue que la oposición ganó en Coahuila, y Morena y sus aliados ganaron el bastión que antes ostentaba el PRI, el Estado de México.
Se pueden hacer muchas conjeturas sobre el caso, pero el hecho es que el partido oficial se quedó con lo que se pudiera llamar la cereza del pastel, el Estado de México, que es el que tiene la mayor población en todo el país y que, gracias al mal trabajo, a las negociaciones en lo oscurito de las élites en el poder, ahora ese bastión que por casi 90 años fue del PRI, será gobernado por la maestra Delfina Gómez, o quien esté detrás de ella.
Desde mi modesto punto de vista, estas elecciones son un reflejo de lo que nos espera para 2024, año en que se decide nuevamente quién nos gobernará a los mexicanos en todo el país. Hay analistas que hacen el recuento de los daños, después de la elección del 4 de junio, que afirman que a pesar de que Morena ganó el estado más poblado del país, con 12.5 millones de electores, solamente la quinta parte votó por el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Según la columnista Anabel Hernández, quien escribe en DW, Morena solamente consiguió en las elecciones del pasado domingo, la cantidad de 3.2 millones de votos, ya con las alianzas del PVEM y el PT, como partido únicamente alcanzó la cantidad de 2.1 millones de votos, en comparación con el año 2018, cuando ganó AMLO la presidencia de la República, con 3.7 millones de votos, Morena disminuyó en 1.6 millones de votos. Además de que, según el análisis de la columnista, los beneficiarios de los programas de transferencias monetarias del presidente en el estado de México, que son 2.5 millones de personas, ni siquiera salieron a votar en su totalidad.
Lo anterior es solamente un análisis a la luz de la derrota, si se quiere ver así, pero alecciona un poco sobre lo que depara el destino, tanto a los seguidores del partido en el poder, como a los de la oposición. Pero, sobre todo al pueblo pobre de México.
En junio de 2024 las elecciones vendrán nuevamente, ya a seis años del arribo de AMLO a la presidencia de la república, los mexicanos ya podemos hacer un análisis, sino de datos duros, sí de los hechos de la realidad concreta. ¿Qué ha pasado en estos cinco años de gobierno de la 4T en nuestro país? ¿Hay alguna mejoría en los ingresos de los que menos tienen? ¿Los programas emblema del presidente, han sacado de la pobreza a los mexicanos? ¿Las obras faraónicas como el tren maya, el aeropuerto Felipe Ángeles, la refinería de Dos Bocas, han servido de algo para los que menos tienen? ¿El combate a la corrupción funcionó? ¿La inseguridad en el país ya disminuyó? ¿El sistema de salud ya es como el de Dinamarca?...
Ya es hora de que el pueblo pobre de México le pida resultados concretos al gobierno de la 4T, ya es hora de que los que menos tienen analicemos si los dichos del presidente en la mañanera se han visto reflejados en verdaderas acciones de cambio en favor de los que menos tienen en nuestro país, ya es hora de que los mexicanos abramos los ojos y nos demos cuenta de que México no está mejor con López Obrador, y como a él le gusta llamarle su 4T, estamos peor que antes, hay muchas mayor inseguridad en nuestro país, los asesinatos aumentaron 165 mil en lo que va del sexenio, aún no termina, la salud está por los suelos, cuántos muertos tuvimos que aportar en la época de la covid-19, cuántos se están acumulando por falta de recursos en los hospitales, por falta de medicamentos, por falta hasta de los más indispensable, camillas, aparatos, etc., cuántos mexicanos han caído en la pobreza extrema por la inflación en los productos de la canasta básica, a cuántos no les alcanza para comprar el huevo, la leche, frijoles, a pesar de que los programas de transferencias monetarias han querido esconder la realidad, la pobreza delas familias mexicanas sigue creciendo.
Pero no es con quejas como vamos a lograr que México salga adelante, es educando al pueblo, concientizándolo para que se organice y luche, haciéndole claridad de la realidad que vive nuestro país.
Solamente el pueblo organizado puede hacer un verdadero cambio de rumbo en México, Morena no es el partido de los pobres, Morena es otro brazo más de los ricos en este país, al igual que los otros partidos que ya gobernaron, aquí lo único que estamos viendo es la guerra por el poder político entre los ricos de este país, solamente que ponen como pantalla a personas como el actual presidente Andrés Manuel López Obrador, y los demás candidatos de la oposición.
Ya es hora de que los mexicanos formemos el verdadero partido de los pobres de México, y solamente será posible si día a día nos dedicamos a explicar pueblo por pueblo, colonia por colonia, lo que está sucediendo en la realidad; estudiantes, profesionistas, obreros, colonos, comerciantes, hombres, mujeres y niños, todos juntos podemos hacer que México sea un país donde el pueblo pobre gobierne para el pueblo pobre. Organicémonos y luchemos junto al Movimiento Antorchista Nacional, la organización mejor consolidada y con un proyecto de país que realmente sacará de la pobreza a todos los mexicanos. Únete al Movimiento Antorchista Nacional.
0 Comentarios:
Dejar un Comentario