Dice Julio Boltvinik, experto de El Colegio de México, en la introducción de su obra Conceptos y medición de la pobreza. Necesidad de ampliar la mirada: “La pobreza, degrada y destruye moral, social y biológicamente al más grande milagro cósmico: la vida humana. La pobreza es una aberración de la vida social, un signo evidente del mal funcionamiento de la sociedad”. En México bajo el gobierno de la 4T algo está funcionando mal, pues millones de mexicanos viven, y se suman día a día a la pobreza según los datos de expertos en la materia.
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), dijo que del 2018 al 2020, México con una población de 126 millones de habitantes, pasó en el número de mexicanos en situación de pobreza de 51.9 millones a 55.7 millones, que es un dos por ciento de incremento. Según este organismo, el 43% de la población está en situación de pobreza. También señala que la pobreza extrema se incrementó al pasar de 7% al 8.5% lo que significa que las personas en tal situación alcanzaron 10.8 millones (Forbes, 5 de agosto).
Agrega el Coneval que “la emergencia sanitaria por la Covid-19 ha profundizado los desafíos que enfrenta la política de desarrollo social en todos los ámbitos, principalmente en el ingreso, salud, educación y alimentación de la población mexicana”.
El Sol de México en su edición de 21 de septiembre del 2021, en su sección de finanzas, resalta: “México reprueba en bienestar material”, agregando “El país obtuvo una calificación de 42% en el apartado de bienestar en una lista de 43 naciones”. Ya en el contenido de la nota, precisa: México se ubicó entre los 10 países con menor calificación en bienestar material de una lista de 43 naciones”, esto en un estudio elaborado por el fondo de inversión francés, natixis investment manager. Este estudio califica el desempeño en tres indicadores, a saber: índice de igualdad en ingresos, ingreso per cápita y el índice de desempleo. El primer indicador nos refleja, por ejemplo, la diferencia abismal de lo que percibe un obrero, un jornalero y lo que gana un dueño de una empresa, un gerente, un funcionario u otro elemento acomodado. El ingreso per cápita no dice el ingreso promedio por habitante.
Todos estos datos (algunos de los cuales son muy conservadores, pues hay quien habla de que la población en pobreza alcanza más del 70%) nos debe llevar a la conclusión de que en nuestro país millones de mexicanos se debaten en la pobreza, llevando, como dice el experto en el estudio de la pobreza, Julio Boltvinik, a la degradación moral, social y biológica. Traducido en al lenguaje llano una población sin acceso a la educación y la cultura; una población que vive problemas en su tejido social, en la familia, en su comunidad, con problemas de seguridad, de problemas intrafamiliares o de disolución de las mismas, etc.; individuos con problemas de alimentación y en consecuencia con un desarrollo físico deficiente.
El otro lado de la moneda. Según la Oxfam, 120 mil personas, que representan el 1% de la población, concentran nada más ni nada menos que el 43% de la riqueza de nuestro país. Así las desigualdades en el “Estado del Bienestar”.
Tanto el estudio del Coneval como el Natixis entran dentro del periodo en que nos ha gobernado la 4T, y reflejan la situación económica y social de México. Lo que significa que la situación de bienestar material y espiritual (educación, cultura, etc.) ha empeorado significativamente en este gobierno. No se le puede echar la culpa a los gobiernos neoliberales del pasado, como acostumbra López Obrador. Lo peor es que no vemos la luz al final de este callejón oscuro en el que nos ha metido el gobierno actual. El presidente habla, en donde se pare, de un México ideal donde la pobreza no existe, pero la realidad le golpea el rostro todos los días, pues una mentira auque se repita mil veces no deja de ser una mentira.
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