“Esto de las clases en línea nos está costando a mi esposa y a mí, pues no entendemos esto de la tecnología, traíamos un cacahuatito para comunicarnos y tuvimos que comprar un celular para que nuestros hijos continúen estudiando".
Así lo relata Héctor Salazar, habitante de la comunidad de Santiago Coltzingo perteneciente al municipio de Ocoyucan, mismo que se encuentra en los límites entre Atlixco y Puebla capital. Para él como para miles de mexicanos la pandemia sólo ha dejado más problemáticas, pues los ha desempleado y los tiene sin apoyo de los programas federales hoy desaparecidos por la administración morenista estatal y nacional.
Pese a que en este mes se dio a conocer que la matrícula de preinscritos a educación básica es mayor con respecto a la del año pasado, se estima que un 30 por ciento deserta de las clases en línea dado que carecen de los servicios básicos para ejecutar sus clases, y es que, basados en datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en Puebla más de 80 por ciento de los estudiantes de la entidad viven en casas en las que se carece de computadora y de acceso al servicio de Internet.
“Al principio nos costaba más, la maestra nos decía ‘abran el link’ y nosotros decíamos ‘¿qué es eso?", pues ya entrabamos media hora después".
Sumado a esta problemática Don Héctor nos explica que actualmente es comerciante ambulante, pues sin miramientos fue ‘descansado’ de su empleo que le permitía mantener a su familia de manera decente, ahora sus recursos han disminuido considerablemente mientras que sus necesidades se han elevado.
“De la venta sacamos lo invertido, pero tenemos que comprar un paquete de 100 pesos para tener datos, esto es un robo, no nos dura y tengo 3 hijos que tienen que hacer videochat. Salgo con mi familia a vender, es pesado pues hay que esperar el camión que pasa cada media hora, a veces una hora; luego llegamos cansados y tenemos que sentarnos con los niños a hacer tareas".
Por otro lado, maestros y estudiantes han destacado que, pese a las múltiples plataformas existentes para llevar a cabo una clase, hay limitantes que no pueden superar como problemas en planteamientos, la misma conexión de red que se corta en múltiples casos, así como los espacios en donde el alumno intenta desarrollarse.
“Sinceramente estas clases me preocupan, pues no sabemos si realmente funcionan, veo que a veces mis hijos no entienden los temas tocados en clases y pues me preguntan pero yo soy un ignorante y siento feo no poderlos apoyar, mis pequeños a veces copian de la tarea que otros compañeritos mandan, porque soy un ignorante, pero quiero que mis hijos se superen, para que en un futuro no tengan la penosa necesidad de contestarle a sus hijos ‘No sé, solo estudié hasta 3er grado de primaria", pues ‘ora si, mis hijos saben lo poco que yo sé".
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