El agua representa el 80% de la composición de la mayor parte de los organismos. Además, juega un rol trascendental en el proceso de la fotosíntesis de las plantas (alimento de muchos seres vivos) y sirve de hábitat para un grupo de seres vivos. Y, el no utilizar racionalmente este recurso como se debe, pueden ocurrir serios problemas que provocan estrés hídrico, cómo ahora mismo está sucediendo en el territorio nacional y caso critico el estado de Nuevo León, sobre todo el área metropolitana, marcada por la concentración de la población en poco más del 91% de una población de 5,784,442 (cinco millones setecientos ochenta y cuatro mil cuatrocientos cuarenta y dos) según datos del INEGI.
En el transcurso del año 2022, se ha reportado que más del 50% del país padece sequía de moderada a extrema, y dentro de los casos más críticos a nivel a país según Conagua son:
1) CDMX: Con sólo 644 hm3 al año, las personas reciben 73 m3 per cápita.
2) Edomex: Obtiene sólo 4,786 hm3 de agua al año. Y abastece 268 m3 per cápita.
3) Aguascalientes: Con un total de 536 hm3 al año, y 396 m3 por persona. Es el estado con la media más baja de agua renovable por año.
4) Tlaxcala: Esta entidad recibe 868 hm3 al año. Y tiene 644 m3 de agua per cápita.
5) Guanajuato: Tiene 3,886 hm3 de agua al año. Y ofrece a su población 648 m3 per cápita.
6) Baja California: Obtiene 3,054 hectómetros cúbicos al año, y 827 metros cúbicos al año por persona.
7) Nuevo León: Tiene sólo 4,448 hm3 al año y puede abastecer 828 m3 por persona.
8) Querétaro: Tiene 1,940 hm3 al año. Y ofrece a su ciudadanía 915 m 3 per cápita.
9) Morelos: Obtiene 1,848 hm3 al año. Abastece a su población 920 m3 per cápita.
10) Quintana Roo: Esta entidad cuenta con 1,741 hm3 al año, y ofrece 993 m3 por persona.
Situación que alarma, pero que desafortunadamente nadie hace algo verdaderamente efectivo para resolver la falta extrema del vital líquido.
Entre los estados mencionados, sin duda, el más afectado ha sido nuestro estado de Nuevo León. Los habitantes que vivimos en dicho lugar hemos tenido que hacer de todo para poder lidiar con la escasez del agua, entre las inclemencias del tiempo, prácticamente asándonos ante las altas temperaturas y el mal administrado recurso hídrico por los responsables del área en cuestión
Según tengo entendido el gobierno federal y en especial nuestro presidente el Lic. Andrés Manuel López Obrador sabe de la crisis hídrica de Nuevo León y aun así nos ve interés en resolver el tema de desabasto con un proyecto integral de gran envergadura que solucione el problema a largo plazo más allá del año 2050 que está proponiendo nuestro gobierno estatal.
Además, la sobreexplotación del recurso por parte de las empresas Ternium México, Cervecería Cuauhtémoc Moctezuma, Alfa Subsidiarias, Vitro, Coca Cola entre otras, son empresas que necesitan el agua para poder trabajar, potencializando la crisis del vital liquido y nadie alza la voz buscando la racionalización del recurso. Seguimos inmersos en el modelo económico neoliberal donde prevalece la ganancia concentrada en unas cuantas manos, generada por la gran mayoría que son la clase trabajadora. Y esta no recibe ni agua a cambio de su esfuerzo y sacrificio.
Es necesario la generación de empleos, y por lo tanto la existencia de empresas que lo generen, pero lo que no existe es un equilibrio de lo que se produce y para que se produce, y es aquí donde el gobierno en turno, sobre todo el federal debiera meter mano y equilibrar la producción de mercancías necesarias para la subsistencia del ser humano cosa que no sucede, lo que trae como consecuencia la sobreexplotación de los recursos naturales como es el caso del agua entre muchos otros más. Esto sucede por una simple y sencilla razón, porque el arquetipo económico en el que se mueve preponderantemente la población mundial y de donde México no se escapa y por lo tanto tampoco las entidades federativas que lo componen, es un generador de riqueza y gran concentrador de la misma, objetivo primordial del modelo económico neoliberal, sin importar para nada lo que le suceda a la clase trabajadora productora en una mayor proporción de tal riqueza, quedando desamparados los jornaleros y obreros del campo y de la ciudad, sufriendo y padeciendo todo tipo de necesidades, como la falta el insustituible y vital líquido.
Urge que el pueblo luche y se eduque de mejor manera, de tal forma que se dé cuenta por sí mismo de la necesidad insoslayable de tomar el poder político por la vía democrática, y que esto tiene que ser y suceder con gente cultivada, solidaria, fraterna, sensible, humanista probada, nacida del mismo seno de la clase trabajadora, buscando todo el tiempo la supremacía humana acompañada del abasto de las necesidades prioritarias para el diario vivir, urge en calidad de imperioso cambiar de raíz a nuestra clase gobernante y como consecuencia natural de esta evolución el cambio o transformación del modelo económico concentrador de riqueza, por uno justo y distributivo de forma equitativa; que el rol de los gobernantes y gobernados se invierta, solo así se podrá lograr la tan anhelada justicia social y económica, solo con el pueblo en franca lucha, educado y organizado lo podrá lograr. Infortunadamente llegaron los falsos mesías de la cuarta transformación y sus compinches y vemos los desastrosos resultados, ni agua nos pueden dar…
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