Imagina vivir en una colonia donde el agua llega solamente tres horas al día y que tienes que estar al pendiente para apartar agua en algún garrafón, imagina que tu casa es de madera y las láminas están casi podridas y cuando llueve las goteras son demasiadas, imagina que ése mismo día que llueve no puedes salir de casa porque la calle es inaccesible y peor aún, imagina que pierdes el bono de puntualidad, que te descuentan lo de dos días y que solo puedes faltar una vez más porque si no te corren, imagina que en tu alacena solo queda para comer un día y faltan 3 días para que sea quincena, que tienes tres hijos y que todos ellos piden un plato de sopa, imagina que el carro de basura no ha pasado desde hace 15 días y que la pestilencia a las afueras de tu casa es perturbador; imagina no tienes siquiera un colchón seco para dormir y soñar, pues las goteras lo han mojado y ahora solo queda dormir en el sillón viejo de la sala.

Quienes no tienen que soñar son los miles de habitantes de la Zona Este de Tijuana, una de las delegaciones que vive los más altos índices de pobreza, la demarcación, que aunque no está en estadísticas, tiene más del 90 por ciento de sus calles sin pavimentar, donde las colonias a pesar de tener años de fundación no tienen siquiera los servicios básicos como agua, luz, drenaje, la zona donde se encuentran las empresas más grandes y que aportan, o debieran aportar más impuestos para los tijuanenses, la zona donde viven miles de obreros que hacen que esta ciudad crezca.

Cuando la presidenta municipal Montserrat Caballero, asegura que Tijuana es una sola y que no se divide, es porque en realidad falta todavía mucho por conocer, recorrer y cambiar, quien viva en la Zona Este sabrá de lo que habló, quien no que se imagine todo lo que arriba mencioné, las colonias en la Zona Este están en el olvido, colonias que tienen más de 15 años y que no les ha llegado siquiera el agua potable, colonias donde no se conoce lo que es el drenaje o siquiera lo que es una calle bien arreglada, colonias donde viven miles de obreros y que se levantan todos los días a la mitad de la madrugada para salir en búsqueda de un taco.

Durante estos años hemos trabajado en colonias ejemplo, el antorchismo se ha planteado crear colonias completas, con servicios públicos, con escuelas, con canchas deportivas, con centros de recreación, pero nuestro trabajo es todavía muy poco en comparación con las colonias que se encuentran con este tipo de rezago.

Tijuana no se divide, ya está dividida, la dividieron las administraciones pasadas, destinando pocos recursos para esta área, la dividieron los actuales gobernantes, quienes consideran invertir mejor en zonas céntricas como el área 1 de Plaza Río, la han dividido todos aquellos quienes privilegian desarrollar zonas industriales y comerciales en la zona Poniente o Centro. Los gobiernos han volteado a ver para otras partes, pero no para la Zona Este, comparemos la zona de Playas de Tijuana con la zona de la Presa Este, a su alrededor, colonias desoladas, casas de cartón, obreros que lucha día a día por mejorar su calidad de vida, en Playas de Tijuana, calles pavimentadas, drenaje, alumbrado público, revestimiento de pintura en áreas públicas, etc. Aquí no se divide lo que ya está dividido, lo que se tiene que hacer, es trabajar para que Tijuana se desarrolle proporcionalmente, para que Tijuana avance en todas partes, para que el presupuesto sea equitativo.